jueves 18 de abril, 2024
  • 8 am

Salto perdió el autoestima

Facundo Marziotte
Por

Facundo Marziotte

7 opiniones

Por Facundo Marziotte
Desde hace ya varios años vemos cómo nuestro Departamento se encuentra en un sostenido decaimiento. Se ha vuelto deslucido, apagado y con falta de oportunidades. Es una especie de secreto a voces, pero que pocos se animan a levantar el tono para que la discusión esté sobre la mesa, y es eso lo que intentamos hacer con estas líneas.
Los que tuvimos la suerte de conocer el Salto del orgullo de ser de acá, de presumir a nuestra ciudad cuando salíamos a otras partes, añoramos esos tiempos y somos responsables de contarles a las generaciones más nuevas que es posible, ya que lastimosamente se han acostumbrado a otras cosas. Se pudo, fue real, por eso se tiene que poder nuevamente.
Éste Departamento en el que tuvimos la suerte de nacer, tiene por naturaleza una infinidad de características que lo hacen grande, y es eso lo que se han dejado caer. El Agua termal, las costas al Río Uruguay, Parques naturales y artificiales, producción hortofrutícola y ganadera (sobre todo Ovina), variados circuitos históricos, somos la tierra de Quiroga, de Marosa y de Víctor Lima, pero también somos la tierra de Leandro Andrade, de Suárez y Cavani, y lo más importante, que es su gente.
Sabedores de que nos hemos quedado cortos en los elogios naturales, y que muchos estarán pensando en los me quedaron en el tintero, me hago una pregunta cada día y quiero compartirla con ustedes; ¿Cuanto se ha hecho en los últimos 10 años por potenciar estas características?, tómense un minuto y miren hacia atrás. Probablemente descubran lo que yo descubro cada día en qué hago este simple ejercicio.
La falta de proyección de un Salto que haga hoy pero que piense en el futuro, es lo que nos ha hecho perder él autoestima. Ese autoestima que nos hacía distintos, que lograba cosas importantes, pero que estaba potenciando por liderazgos que iban en el mismo sentido y no se conformaban con tapar algunos pozos o simplemente pagar los sueldos a los empleados. Él conformismo nos ha ido matando y es lo que tenemos que Cambiar.
El Dr. Néstor Albisu en uno de sus maravillosos escritos hace varios años escribía lo siguiente: «Si no eres salteño y encuentras alguno por cualquier lado, lo sabrás enseguida. No pasarán 5 minutos de charla antes que tu interlocutor te nombre algo que lo relaciona a su tierra natal. Siendo estudiante y viendo esa costumbre que no me era ajena, parafraseamos una frase de un periodista correntino de Soiza Reilly (década del 40 al 50). Este tenía audiciones radiales, hablaba muy rápido y las terminaba diciendo: «Se te terminó tu cuarto de hora» (nombre y duración de sus cortos radiales). Este periodista mostraba su orgullo por Corrientes, como nosotros por nuestro departamento. Tomamos una de sus frases y con los cambios adecuados la usábamos para demostrar esas ansias que tiene el salteño de contar al desconocido, cuál es su ciudad de origen. Así quedaba la frase: «No le preguntes nunca a un uruguayo de dónde es…Si es salteño pronto te lo dirá»: tenemos que recuperar esto y más.
Tenemos que convertir la falta de autoestima en rebeldía con contenido, en esa que nos haga levantar la mirada y que no nos vuelvan a acostumbrar al no se puede, a ver la ciudad fea, a que en Salto no haya oportunidades, a que a los gurises para que les vaya bien se tienen que ir. Nos fueron empujando de a poquito a la mediocridad y eso es lo que históricamente nunca fuimos, peguemos un grito de Libertad y Rebeldía para volver a encontrar nuestro orgullo de ser salteños.