En todo deporte, ganar torneos no es fácil – muchos jugadores compiten a la vez, y al final uno y solo uno logra vencer. Así y todo, en muchos deportes los jugadores claramente superiores logran campeonar con relativa facilidad y frecuencia, por lo que de antemano en cada torneo son muy pocos los que arrancan como verdaderos candidatos. En golf esto no pasa – es difícil acertar a priori entre cuáles participantes habrá de estar el futuro ganador. Si bien para cada lance de golf la técnica requerida debe ser perfectamente dominada – atributo no excesivamente difícil de obtener – la precisión final lograda depende de sutiles condiciones del ejecutante, tanto físicas como emocionales, en ese instante. Esta variabilidad hace que para volver a ganar en golf no alcance con saber jugar muy bien (entre los propios profesionales al más alto nivel, que compiten promedialmente unos 30 torneos al año, es noticia cuando un jugador gana más de 2 o 3 torneos). Esta introducción es para que el lector entienda la cabal magnitud deportiva de los últimos logros de nuestra campeona Graciela Viettro.
A nivel salteño, todos los torneos femeninos jugados desde que comenzaron en 2021, hasta la fecha (en total 9), han sido ganados por “Grace” con relativa facilidad, por lo que se mantiene invicta. A ello hay que sumarle una gran cantidad de triunfos en canchas de todo el país, destacando especialmente varios torneos en el verano, pero sobre todo un vicecampeonato en la prestigiosa Copa Volvo (2da entre 18, donde se encontraban varias de las mejores jugadoras uruguayas), disputada el mes pasado en la exigente cancha de La Tahona Golf, y sus dos triunfos en el último fin de semana: campeona en Altos del Arapey (imponiéndose en reñido final a dos argentinas), y también campeona – como siempre – en Salto Golf Club.
Graciela ejecutando uno de sus fabulosos golpes y recibiendo de John Iriondo, gerente gral de Altos del Arapey, el trofeo como campeona.
