Por Pablo Vela
A lo largo de más de un año, en el espacio que nos concede este prestigioso medio, hemos venido señalando entre otras cosas porque entendemos que debemos ser más responsables a la hora de votar.
Porque debemos asumir con mayor entusiasmo ese momento sagrado como lo es el de sufragar ya que allí decidimos entre otras cosas la conformación del Parlamento Nacional, cámara de Diputados, Cámara de Senadores, en definitiva ponemos a unos compatriotas en una posición de mucho poder pero también de toma de decisiones importantísimas para el día a día del país.
En síntesis, el 27 de octubre próximo elegiremos a quienes trabajaran por mejorar el país: corregir cosas mal hechas en el pasado inmediato e impulsar soluciones para situaciones injustas o no consideradas hacia el futuro.
Solo con eso, hay un nombre que resalta a la hora de pensar en el senado: Gustavo Zubía hoy se ha transformado en un político atípico por reconocer errores, asumirlos pero en la misma acción proponer la solución, con fundamentos. Da la cara, no especula, merece el respaldo de la gente sobretodo porque su especialidad, la seguridad, lamentablemente sigue siendo el tema de mayor preocupación para población uruguaya en general.
Pero esa papeleta que se ingrese al sobre apoyando a Andrés Ojeda como nuestro presidenciable en un Partido Colorado que crece (no por lo que digan las encuestas si no por lo que se escucha en las calles), que premiará el esfuerzo de Gustavo Zubía logrando una banca del senado nos va a dar la chance de ayudar desde una banca en la diputación.
Desde allí sumaremos principalmente, también, en ese tema que no se ha quedado únicamente en la capital del país si no que lamentablemente ya comenzamos a ver en nuestro hermoso departamento (venido a menos en éstos últimos 10 años).
La seguridad pública también será una bandera que elevaremos y apoyaremos desde la cámara de diputados, respaldando las iniciativas de Andrés Ojeda y Gustavo Zubía, pero la impronta local estará presente.
Por ejemplo, la destacada labor local de la Jefatura de Salto, con el Jefe Carlos Ayuto a la cabeza merece un gran esfuerzo para conseguir mayor recursos humanos (más allá de los 68 ingresos recientes), mayor logística y también iremos por mayores recursos económicos porque los vecinos nos piden la reapertura de los destacamentos como ya se hizo hace unos años y ellos, que son quienes viven el día a día, entienden que funcionó como disuasión, prevención y para ellos debemos trabajar.
Pero además, iremos por la construcción de al menos 10 nuevas comisarías, o destacamentos o puestos de vigilancia. No será sencillo. Nos esperan gestiones en el Ministerio del Interior y varias reparticiones en especial, además de la Intendencia, etc., será una tarea complicada y de una multiplicidad de órganos participantes importantes pero la importancia del resultado lo amerita.
El mapa delictivo ha ido mutando a lo largo de los últimos años en nuestra ciudad, por cuestiones lógicas (demografía, crecimiento de la ciudad, nuevas modalidades delictivas, etc.) por lo que habrá que sentarse con quienes más entienden de ello, la Policía Nacional, Fiscalías, enlazar con quien haga falta a la hora de buscar los recursos económicos (MEF, OPP, etc.) y brindarle a nuestros ciudadanos la seguridad que se merecen.
De la mano de ésta medida de infraestructura deberá también lograrse que finalmente se promulguen proyectos ya presentados por el diputado Zubía porque la batalla contra el delito, contra la inseguridad tiene varios frentes, varias caras y a la hora de dañar no dan ventaja alguna.
La 9007 asegura desde la banca del senado como la de diputados, arduo trabajo en pos de buscar la tranquilidad en la que los uruguayos merecemos vivir.
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