Por Pablo Perna
En junio del año 2021 un grupo de colorados comenzamos a reunirnos alrededor de una mesa buscando una renovación partidaria en el departamento, creando un movimiento que llamamos “Juntos Cambiemos”; primero debíamos de renovar el Ejecutivo y luego designar un nuevo Secretario General, que es la autoridad partidaria máxima. Nos enfrentábamos a una estructura poderosa y fuertemente rentada encabezada por un Senador, un Diputado, jerarcas en CTM, MSP, ASSE, OPP, MIDES, entre otros organismos y docenas de cargos rentados en la administración pública y/o asociaciones civiles, entre otras personas en pase en comisión, que son funcionarios que cobran sueldo sin cumplir horario. Automáticamente fuimos calificados de “cuatro de copas” y “perdedores”, en virtud que ninguno ocupábamos cargos políticos, sino que vivíamos de la actividad privada.
Si bien fuimos subestimados pudimos renovar el Ejecutivo Departamental y designar al Secretario General del Partido, cargo que se me honro ocuparlo. Durante nuestro mandato denunciamos formalmente los ingresos masivos clientelares a CTM, dirigiendo la denuncia a las autoridades máximas del Partido Colorado (Sanguinetti) y Nacional (Iturralde). Nadie nos dio importancia, ni se escandalizaron, hasta que el periodista Preve levanta la noticia a nivel nacional y el Uruguay se estremece, lo que culmino con la renuncia del presidente de CTM y el resto de la historia es conocida por todos.
Los triunfos de Juntos Cambiemos duraron apenas nueve meses, en virtud que ante lo fastidiosos que resultábamos ser para el establishment uno de nuestros integrantes “misteriosamente” nos traiciona votando a favor de los poderosos del partido, por lo que fuimos desplazados. Se nos dijo que habíamos ganado en la liga lo que teníamos que ganar en la cancha, pero esa derrota termino siendo victoria en virtud que aprendimos que ellos también tenían debilidades y que perdían.
De esta manera en el 2023 retomamos la mesa y formalizamos un nuevo movimiento la que tendría como objetivo renovar estructuralmente al partido para luego transformar a Salto; para ello debíamos cumplir dos objetivos que fueron escritos a fuego: PRIMERO ganar las internas en junio del año 2024, el que proclamaríamos a Marcelo Malaquina como candidato único a la intendencia por el Partido Colorado; y SEGUNDO: obtener la diputación y un segundo lugar al senado en octubre de 2024. Ambos objetivos lo hemos cumplido, ganamos las elecciones internas y la Convención del Partido Colorado proclamo a Malaquina como candidato único a la intendencia por nuestra colectividad; y también se logra obtener la banca al senado en la primera suplencia de Robert Silva y la banca de diputados por Salto.
Quedó probado que los “cuatro de copas” no solamente sabían ganar en la liga, sino que también ganábamos en la cancha, nos faltaba tiempo; de un sector con 0 votos pasa a obtener más de 9.000, además de ser el única departamento del país donde las listas no alineadas a Bordaberry ganan. También ha quedado probado que el trabajo realizado con la fuerza de las convicciones y el cerebro es más fuerte que la utilización de la fuerza bruta, afianzando los principios ancestrales de que “la pluma es más fuerte que la espada”. Ahora que renovamos las autoridades partidarias y logramos las bancas en el Parlamento, por el porvenir de nuestro querido Salto también en mayo del 2025 renovaremos al Gobierno Departamental.
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