Por Andrés Torterola
En una entrevista concedida a CAMBIO, el presidente del INAU, Dr. Guillermo Fossati, destacó su presencia en Salto para la inauguración del CAIF “El Apapacho”. Señaló que este centro es parte de una serie de proyectos de CAIF que el instituto tiene planificado, y afirmó que el 2024 fue un año ambicioso en este sentido.
BENEFICIOS
Todos reconocen la importancia del cuidado, la atención y la educación en la primera infancia, una etapa fundamental que abarca diversos procesos y mecanismos. Estos incluyen la educación, los cuidados, la estimulación física, social y emocional, así como la atención en salud y nutrición. Por ello, se convierte en un apoyo esencial para las familias, las comunidades y la sociedad en general, ya que, en esta etapa, especialmente durante los primeros 36 meses de vida, se construyen los cimientos que marcarán el desarrollo futuro.
GARANTIZAR FUNCIONAMIENTO
El presidente destacó que, al abordar las políticas de primera infancia, inevitablemente se llega a hablar de prestadores específicos y servicios concretos. Señaló que los Centros de Atención a la Infancia y la Familia (CAIF), un plan implementado desde 1988, han evolucionado a lo largo de diversas etapas y se han integrado profundamente en la cultura del país. Por esta razón, tanto en las pequeñas como en las grandes localidades de todo el territorio nacional, los CAIF son valorados como una propuesta clave por su significado e impacto en la comunidad.
130 NIÑOS
Desde la perspectiva de los padres, los CAIF representan un lugar seguro donde dejar a sus hijos. En este caso, el CAIF “El Apapacho” atenderá a 130 niños, lo que constituye una iniciativa ambiciosa que supera los números habituales de atención. Generalmente, las inauguraciones de estos centros están diseñadas para acoger a 108 niños, y algunas incluso a menos. Esta situación refleja la necesidad de contar con una cantidad específica de niños y niñas para que el convenio firmado con la Organización de la Sociedad Civil pueda concretarse, garantizando la demanda necesaria para su funcionamiento.
SISTEMA DEL FUTURO
En el país se observa una caída significativa en la natalidad, lo que tiene repercusiones a lo largo del sistema educativo. Una de ellas es que, al llegar a los tres años y once meses —edad en que los niños egresan de los CAIF para ingresar a la educación inicial—, se evidencian cambios importantes. Se están anunciando modificaciones en la educación formal, incluyendo la posible ampliación de su obligatoriedad para abarcar desde los tres años, lo que representará un ajuste significativo en el sistema educativo a futuro. Fossati dijo que de ahora en más los CAIF tendrán un foco muy particularmente puesto en los más chiquitos, es decir de 0 a 36 meses, cuando llegan a los tres años ingresarían a la educación inicial.
