En diálogo con CAMBIO, el Padre José García, explicó que el concierto realizado en la Catedral tuvo como objetivo recaudar fondos para la instalación del primer órgano de tubos en Salto, un instrumento único en su tipo para la ciudad. Según informó, se necesitan 15.000 dólares para concretar el proyecto, de los cuales ya se ha reunido una parte significativa, quedando un faltante de 9.000 dólares. Para alcanzar esta meta, se buscará el apoyo de empresarios y personas dispuestas a colaborar con esta iniciativa cultural y artística.
RECAUDACIÓN
El Padre José García señaló que el concierto realizado el 22 de noviembre en la Catedral, donde se presentó «el clavecín», logró recaudar aproximadamente 1.000 dólares. Esta cifra es satisfactoria, se puede considerar una buena recaudación para lo que se podía esperar de este momento, García agregó que, aunque este evento marcó un avance importante, las gestiones continúan en curso.
LOGRAR EL OBJETIVO
Se están realizando trámites administrativos y acercamientos con distintas instituciones, así como con empresarios y personas dispuestas a colaborar, con el fin de lograr el apoyo necesario para completar el proyecto. Sin embargo, aclaró que no se organizarán más eventos de recaudación similares en el futuro cercano. En su lugar, se optará por continuar con las gestiones directas con empresas e instituciones, buscando lograr el objetivo. García se mostró optimista respecto a la posibilidad de concretar la instalación del órgano de tubos, ya que el apoyo de la comunidad y de diversos sectores es clave para alcanzar este ambicioso objetivo. Este proyecto no solo representaría una gran suma cultural para la Catedral de Salto, sino que también enriquecería la vida musical de la ciudad, ofreciendo una nueva posibilidad para eventos de gran envergadura. Con la determinación de seguir trabajando en las gestiones, el Padre confía en que se logrará reunir el apoyo necesario para llevar adelante esta iniciativa.
UN LEGADO QUE PERDURARÁ
A pesar de los desafíos, la comisión se mantiene optimista y continúa ampliando su red de contactos, convencida que el apoyo de la comunidad y las entidades locales será fundamental para alcanzar el objetivo. El órgano de tubos representa una inversión en un instrumento musical de gran valor, y también una oportunidad para fortalecer el patrimonio cultural de Salto y ofrecer a la ciudad un nuevo espacio para la expresión artística. Con el esfuerzo conjunto de todos los sectores, se espera que este proyecto se convierta en una realidad, dejando un legado que perdurará por generaciones y enriquecerá la vida cultural de la región.
