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Octubre es momento de ajustar las dosis de riego y fertilización en los cultivos de tomate

Con el avance de la primavera y el aumento de las temperaturas, los cultivos de tomate ingresan en una etapa de crecimiento acelerado que demanda ajustes precisos en el riego y la fertilización. En este contexto, productores y técnicos destacan la utilidad de FertiRIEGO Horticultura, una aplicación desarrollada por INIA que asiste en la planificación y seguimiento del fertirriego, ofreciendo recomendaciones personalizadas en tiempo real.
La herramienta, disponible de forma gratuita a través de INIA Móvil, combina datos de análisis de suelo, agua y manejo del cultivo con información climática proveniente de las estaciones del instituto. De esta manera, permite optimizar la disponibilidad de nutrientes esenciales -nitrógeno, potasio, fósforo, calcio y magnesio- en cada etapa del desarrollo del tomate.
Una herramienta que guía cada decisión
La Ing. Agr. Cecilia Berrueta (INIA) destacó que, en la zona de Melilla, en el Montevideo Rural, hay productores que están utilizando "la aplicación FertiRIEGO Horticultura para planificar todo el proceso, complementando con herramientas de monitoreo de nutrientes en suelo y planta". La integración de las distintas metodologías permite ajustar las dosis y los momentos de aplicación de agua y fertilizantes con una precisión que antes era difícil de alcanzar. 
"Hoy nos enfocamos específicamente en el análisis de la solución del suelo mediante sondas de succión, una herramienta que complementa de forma ideal las recomendaciones que brinda la aplicación", explicó. Berrueta destacó que esta combinación "favorece el cuajado, el crecimiento y la calidad de los frutos, además de promover un uso más eficiente de los insumos y reducir el impacto ambiental de los sistemas de producción".
La experiencia del productor
El productor Andrés Angiolini, de Melilla, relató cómo integró la tecnología al manejo diario de su cultivo: "La instalación de la sonda la usamos desde el inicio del trasplante. Nos ha servido para darnos cuenta, a veces, de los excesos de fertilizantes o de sodio en las primeras etapas del cultivo".
El monitoreo continuo le permitió detectar problemas que no siempre son visibles a simple vista. "Cuando la sonda no succiona ni saca muestra puede ser un indicador de falta de humedad; entonces hay que ajustar el riego y ver si así se puede extraer la muestra", señaló.
Angiolini comenzó este año a trabajar con la aplicación FertiRIEGO, complementándola con análisis de savia e interpretación de datos. "Al principio tuvimos algunos desafíos para aprender a usarla, pero una vez comprendido su funcionamiento fue bastante fácil. Contamos con la ayuda del técnico de INIA y de nuestro asesor privado. Es una herramienta valiosa porque te permite saber dónde estás parado en el tema de la fertilización", comentó.
El productor subrayó que el proceso "lleva trabajo", pero considera que "vale la pena" porque "ayuda a monitorear los excesos y a mantener un equilibrio que se refleja en la calidad del cultivo".
Tres herramientas que se potencian
Para el Ing. Agr. Manuel Martínez, asesor técnico del predio, la gran ventaja está en la integración de distintas herramientas que permiten monitorear la nutrición del cultivo desde diferentes ángulos. "Tenemos tres instrumentos fundamentales: los tensiómetros, las sondas de succión y ahora la aplicación de INIA que nos guía a lo largo de todo el ciclo de cultivo para realizar las recomendaciones de fertilización", explicó.
Martínez valoró especialmente la posibilidad de cruzar información y validar los datos de campo con los que proporciona la app. "Podemos monitorear desde un comienzo la nutrición del suelo con la sonda y más adelante, cuando el cultivo avanza, controlar la nutrición a nivel de savia del pecíolo. Todo el tiempo estamos guiados por las recomendaciones que hace la aplicación, que toma en cuenta análisis de suelo y agua, estructura del invernáculo y tipo de riego instalado", detalló.
El asesor sostuvo que esta integración "permite tomar mejores decisiones nutricionales, obtener mejores resultados y manejar la fertilización de manera más equilibrada". Según su visión, la digitalización aplicada al fertirriego "no reemplaza la observación del técnico, sino que la potencia", ofreciendo una base objetiva de datos para cada ajuste.
Del desarrollo a la práctica
El Ing. Agr. Joaquín Lapetina (INIA) resaltó que uno de los aspectos centrales del proyecto FertiRIEGO es su inserción en los sistemas reales de producción. "Desde INIA estamos acompañando a productores y técnicos que hacen uso del sistema para conocer de primera mano su experiencia y su aprendizaje. De esta manera logramos una comunicación más efectiva entre los usuarios de la herramienta, basada en su propia práctica", explicó.
Lapetina señaló que este trabajo de campo "permite retroalimentar el desarrollo de la aplicación y ajustar las recomendaciones a las condiciones locales". La experiencia de Melilla, agregó, "es un ejemplo de cómo la investigación aplicada puede generar resultados concretos y medibles en la producción hortícola".
Optimizar la fertilización
La Ing. Berrueta insistió en la importancia de integrar las distintas herramientas para lograr una fertilización más eficiente y sustentable. "El objetivo es obtener mejores rendimientos y cultivos de tomate con un crecimiento más equilibrado, pero también reducir el impacto ambiental de los sistemas de producción", subrayó.
El enfoque de trabajo de INIA apunta a un equilibrio entre productividad y sostenibilidad, a través de la aplicación de tecnologías que promuevan un uso racional del agua y de los fertilizantes. "Cada decisión en fertirriego tiene una consecuencia directa sobre la eficiencia del sistema", concluyó la investigadora.
A medida que las temperaturas aumentan y los cultivos demandan más recursos, el manejo preciso del riego y la nutrición se vuelve determinante. En ese contexto, FertiRIEGO Horticultura se presenta como una herramienta de vanguardia que acerca la investigación al productor y le permite tomar decisiones informadas, basadas en datos y con respaldo técnico.