La noche de domingo fue testigo de una nueva coronación de Salto, la tercera consecutiva a nivel del Litoral Norte y una muy especial también en sí misma, puesto que tuvo el gusto extra de ser en un duelo directo ante un rival histórico como lo es Paysandú. En un partido tan intenso y emotivo como el que albergó el Dickinson dos días atrás, el juego suele brillar poco, y puede resultar difícil señalar rendimientos sobresalientes. Es que este tipo de cotejos, por su propia génesis, tienden a darse en un terreno pantanoso y discreto, donde la mayoría de performances y aptitudes se ven emparejadas. No obstante, aun así se pueden destacar en el combinado de Costa algunos nombres que fueron vitales para la consagración, comenzando a explicar así el triunfo a partir de los aportes fundamentales de Fagúndez (7) y Sánchez (7).
SALTO
Nicolás Sánchez (7): Brindó mucha seguridad en los 120′ de partido, respondiendo de manera notable en las pocas situaciones de peligro que debió enfrentar. Además, volvió a tener otra noche mágica en la tanda de penales. Juan De los Santos (6): Le costó afirmarse en los primeros minutos. Después tuvo la enorme virtud de saber jugar con amarilla y terminó abriendo el marcador con una gran acción. Fue sustituido cerca del final. Junior Rodríguez (6): De lo mejor del fondo. Se impuso en la mayoría de sus duelos individuales y contagió al equipo con su actitud avasallante. Además, se ganó el protagonismo en la imagen final del tricampeonato con la ejecución de su penal. Richard Rodríguez (5): Alternó buenas y malas. No sufrió tanto en defensa, pero se le dificultó bastante con el balón en sus pies. Fabián Leites (4): Floja labor. Perdió más de lo que ganó defensivamente y no gravitó en ataque. Gabriel Távarez (4): Sufrió la lógica friccionada y disputada del pleito. Lo saltearon mucho y apenas apareció a cuenta gotas. Matías Batista (5): De menos a más. Algo impreciso en la primera parte y exuberante en el complemento. Agustín Custodio (6): Buen partido. Estuvo siempre bien parado y fue mayormente criterioso a la hora de distribuir el esférico. Carlos Núñez (4): Al igual que sucedió con Távarez, el trámite lo aisló y no pudo pesar ofensivamente. Nicolás Fagúndez (7): El más claro de Salto. Lideró todas las ofensivas y tomó siempre buenas decisiones, permaneciendo como único lunar en su actuación la intermitencia de sus intervenciones.
Braian Rodríguez (4) Mal encuentro. No supo encontrarle la vuelta a la zaga sanducera y sus contactos con la pelota escasearon notablemente. Nicolás Cáceres (5): Ingresó con una función específica y la cumplió con sobriedad. Diego González (5): Aportó despliegue y enjundia para no pasar sobresaltos. Alan Aranda (5): Pasó desapercibido pese a jugar más de 50′, pero sacó a relucir toda su clase en la tanda de penales. Agustín Pintorelli (5): Jugó poco, pero se mostró participativo y con muchas ganas de alterar el resultado. También dejó su marca positiva en los penales. Facundo Gómez (5): Entró para reoxigenar al equipo de cara al alargue y lo hizo bien. Gabriel De Souza (-): Diez minutos de juego en los que tuvo poca acción y se preparó para su momento decisivo desde el punto penal.
PAYSANDÚ
Leonardo Gómez (7): El mejor de la visita. Estuvo muy firme en el juego aéreo y fue prácticamente impenetrable en los duelos individuales. Fue el líder de su mañoso y utilitario equipo. Santiago Falcón (6): El más incisivo de Paysandú. Se debatió con los zagueros salteños, siendo siempre razón de atención para los mismos. Se desgastó y fue reemplazado en el tramo final. Brandon Logiuratto (6): El revulsivo que mandó Cabillón desde el banco. En su primera intervención ensayó un remate magistral que significó el empate, y a partir de ahí lució claro en sus espaciados contactos con el balón. Sin embargo, falló el último penal de su equipo con un remate muy malo.
