lunes 2 de junio, 2025
  • 8 am

INIA firmó tres grandes acuerdos de colaboración de investigación en China

Avisos judiaciales

El Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA) ha dado un paso gigante en la cooperación científica y tecnológica con China durante la reciente misión oficial, según lo destacó el Ing. Miguel Sierra, presidente de INIA. Uruguay goza de un «trato preferencial con China» al ser uno de los primeros países latinoamericanos en adherir a la Franja y la Ruta y estar en un estadio de «asociación estratégica integral», lo que impulsa la prioridad china en la colaboración, especialmente en ciencia, tecnología e innovación.
La participación de INIA en la misión se centró en tres componentes principales, según explicó Sierra. El primero fue la reafirmación del compromiso de la Academia de Ciencias Agrícolas de China (CAAS) en continuar la colaboración con Uruguay en el tema de la soja, donde ya existe un laboratorio conjunto establecido por INIA.
La delegación, junto al Ministro y Presidente de INAC, visitó el banco de germoplasma de la CAAS, el segundo más grande del mundo, que alberga más de 530.000 variedades. Se destacó el intercambio de material genético, con 50 líneas de soja de China enviadas a Uruguay y 50 líneas de Uruguay a China, que han tenido «muy buenos resultados». Actualmente, se trabaja en la generación de «líneas de élite» mediante cruzamientos e hibridaciones para buscar materiales con distintas cualidades (consumo humano/animal, transgénico/no transgénico, calidad de proteína). La CAAS se mostró «muy conforme con la colaboración».
El segundo componente se centró en la ciudad de Jilin, una provincia al noreste de China con una superficie similar a Uruguay pero 23 millones de habitantes y un PIB de 200.000 millones de dólares, con fuerte producción ganadera y de alimentos. Allí se firmó un acuerdo para establecer un laboratorio conjunto enfocado en la cría y producción sostenible de ganado bovino.
Sierra explicó que el foco de este laboratorio será el «intercambio en mejoramiento genético», incluyendo genes, embriones, semen congelado y técnicos de INIA. El objetivo es colaborar en la gestión de una ganadería más sostenible y de precisión. China reconoce al sector ganadero uruguayo como «muy potente», lo que facilita esta oportunidad de establecer un laboratorio en su territorio.
Por último, se acordó la creación de una granja demostrativa en Uruguay. Esta granja se instalará en las estaciones experimentales de INIA, dándole al instituto un rol destacado en su implementación. El proyecto se centrará en la agricultura digital e inteligente, con un «especial énfasis en la agricultura familiar». Se abordarán temas como la mecanización agrícola (trayendo tecnologías chinas), la demostración de variedades de cultivos chinos (frutas y verduras) que podrían adaptarse a Uruguay, la cría de semillas finas, el procesamiento de frutas y el desarrollo de estándares de calidad de cultivo y gestión basados en tecnologías de la información.
Adicionalmente, como gesto de cooperación, se ofreció obsequiar a China 100 embriones bovinos, aunque su envío aún depende de la habilitación sanitaria.