jueves 24 de julio, 2025
  • 8 am

Cuidando a los que cuidan

Colegio Médico del Uruguay
Por

Colegio Médico del Uruguay

230 opiniones

Dr. Roberto Ferreira Coimbra.
Colegio Médico del Uruguay
Hace pocos días atrás, el colega Dr. Uriarte, puso una vez más sobre la mesa, una temática postergada, delicada y sensible, la salud mental de los colegas médicos. Lamentablemente el dicho “en casa de herrero cuchillo de palo” aplica a la perfección en nosotros los médicos. Y el otro dicho: “no hay peor paciente que un médico” nos deja muy mal parados. Hay muchas razones y complejidades que determinan esta triste realidad.
Los números citados por el mencionado colega son alarmantes, 1/3 de los médicos en ejercicio en Uruguay, tenemos “Burn out”. Y esto es algo que no se soluciona ni rápido ni fácilmente. Además, porque nos cuesta mucho buscar ayuda.
Al respecto de esto último hay razones que lo explican: primero nuestro estatus cultural “de curadores”, la idea de omnipotencia que nos acompaña por ser médicos.
Nos cuesta adoptar el rol de paciente y bajarnos del pedestal de la autosuficiencia. Mecanismos psicológicos como la omnipotencia, la negación, la minimización y la racionalización atentan contra nuestro pedido de ayuda. Además, no podemos dejar de lado, que, y sobre todo en el interior de nuestro país, en ciudades donde todos nos conocemos, ir a consultar por un tema de salud mental, ya sea al psicólogo o al psiquiatra es vivido con mucha angustia y vergüenza debido al estigma de la enfermedad mental y más en un médico. Nos cuesta avanzar bastante aun, como equipos de salud, ya que cuando alguien se enferma por cualquier dolencia psicológica, no faltan los “cuchicheos” en la guardia, los chistes, o comentarios con desdén y prejuicio hacia todo aquel que consulte por un tema de salud mental. Solo cuando nos golpea en carne propia o la de un ser muy cercano, es cuando hacemos el “click” de comprender lo duro que es enfrentar la angustia, soledad y a veces desesperanza de padecer un sufrimiento psicológico.
Ni hablemos si el problema que padecemos, además del estrés crónico que nos afecta a casi todos los médicos de la actualidad, está vinculado a la adicción a una sustancia. En cuanto a esto la estadística dice que el consumo de sustancias entre los médicos es más o menos igual al de la población general, en torno al 10 a 14 %, o levemente superior a la población general. Es menor en cuanto al abuso de drogas ilícitas, pero es mayor a la población general en cuanto al abuso de drogas de prescripción como las benzodiacepinas y algunos opiáceos.
Hay estudios que indican que las especialidades médicas que se asocian con mayor riesgo de a abuso de sustancias son anestesiología, psiquiatría y medicina de urgencias. El alcohol es la sustancia de abuso primaria en los médicos tratados por adicciones, llegando al 50 % de los casos. Para mayor información sobre esto último recomiendo el trabajo “Particularidades del trastorno por consumo de sustancias en los médicos” publicado por la Dra. Laura Sarubbo en la revista científica: “Revista Latinoamericana de psicofarmacología y neurociencia” (Nro. 25- marzo de 2025.)
Por otro lado, creo que deberíamos hacer auto critica como profesionales de la salud, de que descuidamos nuestra salud física y mental a menudo. Sabemos que debemos hacer ejercicio físico, y de sus múltiples beneficios, pero no dedicamos el tiempo para ello. Tenemos rutinas y jornadas de trabajos con horarios extensos, que atentan contra un saludable descanso. Ni hablar del tabaquismo y consumo excesivo de alcohol que desalentamos a nuestros pacientes.
En fin, mucho camino para recorrer, de todos modos, es muy positivo que sigamos generando espacios de prevención y sobretodo profundizar el abordaje y diseño de estrategias para mejorar la calidad de salud mental de los colegas médicos, lo cual redundara en mejorar la calidad de toda la asistencia en salud, porque sin médicos sanos y contentos con lo que hacen no hay posibilidad de una excelente salud para todos.