
Está claro que no han habido partidos sencillos para Universitario en este camino hacia las finales de la Copa de Clubes de OFI. Tampoco ha perdido de vista sus virtudes y defectos, un hecho que le otorga la chapa de equipo con oficio. Por eso, el técnico Alejandro Irigoyen ha tenido una ventaja con este plantel. El domingo se viene otra historia.
«No sé si había otro (equipo) que quería como nosotros estar en la final. Ahora el objetivo se consiguió y buscaremos redondear el campeonato con la copa. No es fácil, las cosas pueden complicarse y todos los equipos son difíciles. Río Negro es difícil y nosotros trataremos de hacérsela difícil a ellos», expresó el entrenador.
Sobre los altos del plantel para llegar a la instancia definitoria:
«Les recordé a los jugadores, que muchos que tienen talento cuando tuvieron que meter metieron y los que siempre meten cuando tuvieron que jugar jugaron. Es lo que corresponde hacer a un equipo que quiere salir campeón; todos trabajan, uno mira para el costado y hay alguien sacrificándose, y si él de al lado no puede yo tengo que dar el doble. Cuando las cosas no salen el equipo mete carácter».
Río Negro de San José será un equipo bravo, que también va por la segunda ‘orejona’ y el técnico rojo es conciente.
«Como todas las finales, capaz que haya mucha disputa y por ahí se juega poco. Ellos son un equipo copero, nosotros también somos un equipo copero y se van a enfrentar los que en los papeles hicieron mejor las cosas», y recordó que este es un momento muy especial: «Soy hincha, fui jugador, mis hijos han jugado acá, la ‘U’ es importante en la vida de nosotros. El corazoncito está y es un gran logro de este grupo».
La delegación de Universitario viajará mañana hacia el sur del país para esperar el choque de ida en el Estadio Casto Martínez Laguarda, el domingo 15.30 horas, con televisación en directo.
El plantel cuenta con las vueltas trascendentes de Octavio Pintos, Valentín Fornaroli y George Do Santos, que no estuvieron en la revancha con Wanderers de Durazno.