Por Andrés Torterola
A casi un año del atropello sufrido a una funcionaria de tránsito por parte de un conductor detenido en un puesto de control, se registró otro hecho que, aunque no tuvo consecuencias graves, dejó un saldo preocupante. En esta ocasión, un inspector municipal resultó lesionado, y tras ser asistido por el equipo médico, se confirmó que presentaba politraumatismos leves. Este incidente pone nuevamente de manifiesto los riesgos que enfrentan los funcionarios en el cumplimiento de sus tareas y la necesidad de reforzar las medidas de seguridad en los operativos de tránsito.
RECURRENTES
En diálogo con CAMBIO, el jefe del cuerpo inspectivo de la Intendencia de Salto, Miguel Da Costa, señaló que, lamentablemente, este tipo de situaciones son recurrentes. Afortunadamente, en este caso no hubo que lamentar lesiones graves. Da Costa explicó que estos incidentes ocurren cuando algunos conductores intentan evadir los controles a toda costa, sin considerar siquiera el riesgo que representan para su propia vida.
CONTRAMANO
La evasión de controles es una situación recurrente, especialmente durante los fines de semana. En algunos casos, las personas que conducen en infracción optan por dejar sus vehículos estacionados para evadir los controles a pie y luego regresan a buscarlos. En otras ocasiones, intenta atropellar los puestos de control. Hasta ahora, se ha tenido la fortuna que no hubo funcionarios lesionados, aunque han existido intentos de evasión de puestos de control. Sin embargo, en las últimas horas, un inspector fue embestido, convirtiéndose en la excepción a esta suerte previa. En el incidente ocurrido el domingo, tanto los dos ocupantes de la moto como el inspector terminaron en el suelo, momento en el que los ocupantes del birrodado fueron detenidos. El puesto de control estaba ubicado en la intersección de Washington Beltrán y Avenida Harriague. Al notar la presencia de los inspectores, el conductor de la moto intentó huir regresando por la misma senda en contramano. En ese trayecto, el inspector le indicó que se detuviera, pero en lugar de hacerlo, ocurrió el atropello. El conductor circulaba sin casco protector y carecía de libreta de conducir, lo que ya representaba una infracción grave. Además, se le realizó un examen de espirometría, cuyo resultado fue cero, descartando la presencia de alcohol en sangre.
MEDIDAS DE PROTECCIÓN
Da Costa señaló que se están implementando medidas para prevenir este tipo de incidentes y reducir al máximo los riesgos que enfrentan los funcionarios durante el desempeño de sus tareas, garantizando su seguridad en la mayor medida posible. Entre las acciones destacadas, mencionó la presencia de apoyo policial en cada puesto de control, con al menos dos efectivos por ubicación, así como la incorporación de conos más altos y con reflectantes para mejorar la visibilidad. Además, los puestos se instalan en lugares estratégicos con buena visibilidad, y las detenciones se realizan en equipos de dos inspectores. Aunque se han adoptado numerosas medidas de prevención, Da Costa reconoció que no es posible garantizar al 100% la protección del inspector.
