Marcelo Malaquina, quien lideró una intensa campaña en las últimas elecciones departamentales, comunicó una decisión personal que marca un alto en su actividad pública inmediata: tomarse un tiempo de pausa para la reorganización. El anuncio fue realizado a través de sus redes sociales, dirigido a su base de apoyo: «amigos, dirigentes, militantes y a todas las personas que confiaron en nosotros con su voto». Malaquina calificó los últimos años como un período de «enorme intensidad, de sacrificio y de trabajo sostenido», que culminó con una «buena votación» y la asunción de un nuevo gobierno departamental. El político destacó que el respaldo de más de 14.500 salteños no solo les dio una responsabilidad, sino también una enseñanza.
MIRADA A LARGO PLAZO
El mensaje hace énfasis en que esta decisión no implica un adiós definitivo. «No es un retiro ni un final; es una pausa necesaria para rearmar con serenidad y profundidad un proyecto político», sentenció Malaquina, añadiendo que es momento de «mirar con perspectiva el camino transitado para aprender y juntar impulso hacia el futuro». En una velada crítica a los movimientos internos tempranos de cara a las próximas instancias electorales, Malaquina señaló que, si bien falta «mucho para las próximas elecciones nacionales y departamentales,» observa a muchos «focalizados tempranamente en estrategias, cálculos y movimientos anticipados». El dirigente defendió un enfoque de crecimiento basado en el mérito: «Creo profundamente en crecer por mérito propio y no ‘pegando codazos’ al que está al lado.»
CONVICCIÓN Y LEGADO INTACTO
Pese a la pausa, el comunicado reafirma la firmeza de su compromiso con Salto. «No he perdido ni perderé jamás la convicción por un mejor Salto, desarrollado y pujante,» aseveró. Malaquina concluyó su mensaje con una promesa de continuidad en sus principios: «El legado de honestidad y franqueza seguirá más firme que nunca».