El año pasado, un grupo de ciudadanos de Salto a los que se le sumaron de Artigas y Paysandú, recolectaron firmas que fueron presentadas ante el directorio de UTE con el propósito de hacerle llegar una inquietud que afecta fundamentalmente a quienes residen en el norte del país. El pedido concreto es que el ente aplique una rebaja del 20% (IVA) en la factura de quienes viven en estos departamentos y durante el verano sufren temperaturas extremas con sensaciones térmicas cercanas a los 40 grados centígrados. Incluso, pobladores de Belén, también en su momento se manifestaron en la localidad, exigiendo una rebaja en las tarifas ya que el encendido de aires acondicionados se vuelve una necesidad y esto provoca que la factura de energía eléctrica se dispare en el verano.
El doble, el triple, y hasta cuatro veces más, pagan algunos hogares por gasto de energía que se relaciona con el encendido de aires acondicionados.
UN RECLAMO JUSTO
El pedido ciudadano no tuvo respuestas de parte del ente y nuevamente otro verano las tarifas se dispararon, pues las altas temperaturas no dejan otra opción. El pedido expreso de Salto se basa además en el argumento del funcionamiento de la represa de Salto Grande que afecta seriamente la costa local y que proporciona más del 50% de la energía que utiliza el país. Sin embargo Salto no tiene ningún beneficio por ello. Quienes iniciaron la recolección de firmas consideran que el pedido es justo, ya que las temperaturas que se soportan en la zona norte del país no son similares a las que se registran en el sur y el este, sin embargo a la hora de pagar por energía eléctrica se paga lo mismo. La situación geográfica y las condiciones del clima deberían modificar las tarifas en los mese de verano. La esperanza radica ahora en plantear esta iniciativa al futuro gobierno nacional que ingresa el 1º de marzo y ver si esta vez el planteo resulta positivo.
