Cr.Walter G. Texeira Nuñez
“Ninguna sociedad humana llega en su progreso más allá de lo que ha imaginado como su meta ni llega más allá de donde cree que puede llegar. Los imaginarios colectivos son determinantes. En nuestro país se ha ido creando y legitimando un discurso público de interpretación de la realidad que funciona como un freno: sin advertirlo hemos puesto un tope creyendo que constatábamos un límite. El Uruguay, por diversos caminos, ha ido reduciendo su noción de lo que es posible y de lo que no lo es o, en otras palabras, una noción encogida de sus posibilidades reales.” Juan Martin Posadas. La Historia Domesticada, pag.49 “Es lo que hay, valor”
Leyendo este pensamiento me puse a reflexionar sobre lo que nos pasa en Salto, como parte integrante de ese Uruguay que queremos transformar, y los convocamos a superar los límites autoimpuestos, a sacudirnos la inercia potenciando nuestras virtudes y posibilidades, a no aceptar que no somos capaces de mejorar y de cambiar.
Llamamos a los salteños a trasladar al gobierno del departamento el mismo cambio de actitud y rebeldía para encarar y solucionar los problemas que está demostrando el gobierno nacional, un gobierno con energía joven que se hace cargo y pone énfasis en el ejercicio de la libertad con responsabilidad, y a ponernos nuevas metas que parecían imposibles. De alguna forma todos somos responsables de la situación de la Intendencia y del departamento y tenemos la obligación de cambiarla más allá de los colores partidarios.
Para esto se necesita una actitud como la que está mostrando el Partido Nacional, solo desde la unidad partidaria se puede convocar con seriedad y confiabilidad para liderar un proceso de reconstrucción departamental.
Hay liderazgos que unen a los partidos, apoyan a los otros candidatos, construyen juntos, se complementan y fortalecen el Partido, y desde ahí pueden convocar a una coalición de partidos y de ciudadanos; por otro lado hay otros que con su conducta hegemónica y egocéntrica, sin empatía dentro de sus propias filas ahuyentan de su Partido a sus compañeros contrincantes internos. ¿Cómo pensar que quienes tienen esta conducta puedan convocar el apoyo de ciudadanos de otros partidos?
Tengamos en cuenta que ninguno de los dos últimos gobiernos departamentales, ni el de Germán Coutinho ni el de Andrés Lima, puede compararse en lo más mínimo con la gestión, los principios y valores del último Intendente blanco Cr.Eduardo Minutti, así como tampoco con las del Intendente Esc.Eduardo Malaquina. Realmente están en las antípodas ya que significaron el desbarranque de la Intendencia poniéndola en la peor situación de su historia.
Dentro de este panorama los ciudadanos deben tener en cuenta que mediante la Ley de Lemas cualquier voto dentro del Partido Colorado va para Coutinho y dentro del FA va para Lima, y que dada la evolución de la opinión de la gente reflejada en las encuestas y que se nos manifiesta cada vez más en la calle, la única opción para cambiar Salto y evitar el continuismo destructor con la reelección de Lima está en el Partido Nacional (PN). En las elecciones del 2010 y del 2015 miles de adherentes al PN acompañaron al P.Colorado ahora nos toca pedirles su apoyo por Salto.
El límite a lo que podamos lograr está en nuestra actitud, ejerzamos nuestra libertad con responsabilidad y hagámonos cargo.
