Cecilia Eguiluz, Cabildo Abierto “La coalición en Salto no existe, no hay un eje programático y no se puede jugar al engaño”
Por Julio Aguirrezábal
Tras haberse alejado de la política y abandonar el sector donde se consolidó (Vamos Salto), Cecilia Eguiluz, retornó a la actividad seducida por la forma de trabajo del Gral. Guido Manini Ríos. En ese sentido creó el sector Éxodo Siglo XXI dentro de Cabildo Abierto que la ha llevado a presentar varios proyectos e ideas que fueron tomadas por el líder del sector político. De la gestión de Germán Coutinho en la intendencia de Salto, Eguiluz se hace cargo de lo que le corresponde, pero aclaró que ella siempre fue leal y transparente, porque desconoce otra forma de hacer política. Debió soportar los coletazos de esa mala gestión que atacaron a su persona y a su familia. Reconoce que no es una persona con el carisma y la simpatía necesaria, pero confía en que Cabildo Abierto en Salto se proyecta muy bien a futuro y para ella será un gran desafío.
———————————————————-
-¿Por qué se fue del Partido Colorado?
-Me fui en el 2017, después que se fue Pedro Bordaberry. Yo me iba a ir de la diputación y eso lo hablé con él, yo era su primer suplente y teníamos realmente una elaboración de trabajo quinquenal pesado, hasta ese momento no lo suplía tanto, pero cuando se retiró, que se tomó varios meses y se fue a España un tiempo, y luego comenzó con el tema de la Asociación Uruguaya de Fútbol, ahí se requería estar y había mucho trabajo. Estuve esa época bastante larga en Montevideo trabajando prácticamente de forma permanente, porque me tocaba hacer las dos cámaras, la diputación y el senado. Pedro es muy exigente, aprendí mucho de él y estoy muy agradecida. En el Partido Colorado, sin Pedro Bordaberry, ya no tenía nada que hacer. Yo me sentía muy identificada con su liderazgo, si bien yo tenía un recorrido histórico previo a que Pedro se incorporara en la actividad política, en realidad creo que lo valioso fue su incorporación.
-¿Se fue del Partido Colorado por la afinidad con Bordaberry o por las diferencias con Germán Coutinho?
-Yo tenía diferencias con el manejo de la orgánica departamental, no tanto personal, porque sé distinguir muy bien eso. Soy bastante orgánica y había algunas cosas que criticaba, nunca salí a hacer ninguna manifestación ni nada por el estilo, no lo pienso hacer tampoco, porque fue un tema que ya pasó. Hablé con las personas que tenía que hablar y bueno, cuando yo resuelvo en forma personal y se lo transmito a mi familia, y a las dos personas más cercanas con las que trabajaba, que me iba a retirar de la actividad política, sentí que los dejaba sin espalda. Yo me fui del Partido Colorado por mí, fue mi decisión, no fue por Germán. Tenía diferencias con el funcionamiento de la orgánica departamental, pero no con las personas. Yo sufrí mucho en la etapa que me fui de la Intendencia, desde el 2015 hasta el 2017 para mí personalmente fue una época difícil, ahí me concentré mucho en trabajar en la actividad departamental con Pedro Bordaberry, y cuando Pedro se va me produce un gran vacío. Y realmente en las personas que quedaron yo no veía una identificación ni liderazgo como para quedarme.
“Cuando asumí la diputación hubo un
trabajo interno para no contar conmigo”
-Germán en una entrevista dijo que uno de los inconvenientes que tuvo con usted, fue que le había pedido que marcara los votos de la interna.
-Eso nunca pasó, es falso. Fue una versión que salió después que yo me fui del Partido Colorado y creo que malintencionada. Lo que sí pasó es que desde el año 2016, luego de haber asumido la diputación, existieron grupos a nivel departamental que empezaron a visualizarse en la diputación y empezaron a hacer un trabajo interno, sin contar conmigo, lo cual para mí tampoco era un problema, porque en realidad el tema son los objetivos que uno tiene en la vida, y la diputación nunca fue mi objetivo, siempre tuvimos un objetivo departamental que era ganar la Intendencia. Es un objetivo muy distinto y además colectivo.
-¿Nunca se le pasó por la mente que en un futuro podía ser Intendente?
-No, ni ahora se me ocurre. Nunca fue mi objetivo, nunca me levanté y pensé en ser Intendente o Diputada. Trabaje mucho por la figura de Germán Coutinho, incluso en la construcción de su figura. Pero bueno…
-¿Qué la sedujo de Cabildo Abierto?
-Manini Ríos. Cuando yo me fui de la actividad política, lo hice sin un líder. Es muy difícil para el político eso. Tengo una amiga que me dice siempre, de buena forma, que yo fui segundona en la política, y es verdad, siempre trabajé con un líder que sentía que lo que decía me identificaba. Entonces, uno tiene la motivación propia pero la intención de apoyar a un líder. Me gusta trabajar en política, estudio y me preparo para lo que hago. Cuando surgió Manini, lo vi, lo estudié con ojos críticos, lo observé y cuando vi que tuvo 50.000 votos en la elección interna sin tener rival en un partido nuevo, lo comencé a observar con un microscopio importante. Me encontré con Talvi que decía que Manini no era democrático, que no se sentaría en la misma mesa, entonces uno se va volviendo hincha de esas cosas, hasta que por casualidad llegué a una entrevista con él, hablé y él muy hábilmente me comenzó a tocar temas políticos. Le comenté proyectos de ley que estaban encajonados del período anterior, intercambiamos cosas y fue cuando encontré lo que yo estaba buscando, un perfil de líder. Manini tiene una visión sobre la clase media y la pobreza muy interesante. En política siempre te dicen que uno tiene que tener una ideología, Cabildo Abierto con la visión de Manini, tiene muchas cosas de varios lados, Rivera, Batlle, Saravia, Rodó. Para mí es una persona muy formada con un gran conocimiento de todo el país, y me empezó a enamorar esa idea. Hablamos de política, yo siempre quería colaborar pero desde fuera, y un día en una conversación muy larga, me dijo: “¡¿Usted que hace fuera de la política?! Tiene que volver, necesito gente como usted, usted necesita volver y la gente necesita gente que le guste la política”. Vine 500 kilómetros pensando que tenía razón, no sabía que hacía fuera de la política si es lo único que a mí me gusta hacer.
-¿Qué pasaría si Pedro Bordaberry vuelve?
-Si vuelve, cosa que no creo, yo ya tengo un compromiso, no estoy para ir y volver. Yo nunca me hubiera ido del Partido Colorado si él no se hubiera ido, pero las circunstancias se dieron así. Ya tengo mi rumbo y jamás fui desleal, he tenido muchas diferencias y enfrentado a mucha gente, pero jamás fui desleal, por eso pude retomar la política y por eso cuando yo me fui, varios se fueron, y volvieron conmigo sin importar en qué partido estoy, uno cosecha esas cosas cuando va por el camino recto.
-¿Es optimista con Cabildo Abierto en Salto?
-Sí, muy optimista. Más de lo que se imagina.
-¿Usted es una mujer con poco carisma y simpatía? Eso genera un poco de rechazo en la gente. ¿Cómo piensa ganarse a los votantes?
-Es un desafío, creo que hoy el que junta realmente los votos en Cabildo Abierto es Manini. Cabildo Abierto necesita armar sus bases departamentales, y yo voy a ser una, y habrá otros. En realidad hay mucha gente que tiene una imagen negativa mía, pero no me conocen. Creo que fue la imagen que me dejó la Intendencia, antes de eso yo había encabezado las listas a la Junta Departamental siendo la única mujer que las encabezaba, obteniendo los votos para ser la primera, jamás me dieron un lugar en las listas, las gané por elecciones. Soy muy optimista y no soy moneda de oro, no estoy en la vida para que la gente me quiera, yo soy una persona que a veces digo cosas que a la gente no le gusta, pero bueno, hay gente que le gusta que lo engañen, la gente sincera, yo soy medio bruta, y digo las cosas que no son políticamente correctas.
-¿De qué se hace cargo de lo que sucedió en la Intendencia de Coutinho?
-Me hago cargo de mi trabajo, y de hecho fue lo que hice. Cuando todo iba bien yo no aparecía en las fotos, nunca fui entrevistada ni nada. Yo entraba a las 7 de la mañana y me iba a las 11 de la noche, siempre que había un problema era mi teléfono el que discaban. Cuando las papas quemaron a mí también me tocó cumplir un rol, el rol de secretario general no es un rol fácil. La Intendencia de Salto ha tenido buenos secretarios, a no ser Fabián Bocchia que para mí fue desastroso. El secretario general de la Intendencia es el que tiene que dar la cara, a mí me dieron días en la Intendencia, decían que no iba a terminar el período. Cuando las cosas estuvieron complicadas, comenzaron a decir que yo era corrupta, cosa que nunca fui, tuve mucha honestidad, porque es la manera de trabajar que tengo, me llamaron de ladrona, y cuando todo eso pasó, que fue la etapa más dura de la Intendencia, la etapa final, se pasaron todos los límites conmigo, incluso dentro del partido se dijeron muchas cosas. En ese momento un día sonó mi teléfono y era mi padre que tenía 90 años en ese entonces, me preguntó si yo había hecho todas las cosas que estaban hablando de mí, porque en la casa de mis padres hasta carteles colocaban, hacían cualquier cosa. Cuando mi padre me dijo eso me puse a llorar, le dije que él no me podía estar preguntando eso. Me dijo que me preguntaba porque necesitaba que yo se lo dijera, y le respondí que no. Entonces salí y defendete, me dijo, que fue lo que hice. Salí sola con mi mochila para Montevideo a aclarar cosas que se decían y eran mentiras.
“En el peor momento de la
Intendencia yo salía por el frente y
daba la cara, “otros” salían por atrás”
-En ese tiempo las bolsas de basura estaban acumuladas en la calle, las calles deshechas, no se pagaba a los proveedores, se atrasaron los sueldos y Termas del Daymán estuvo un mes cerrada por falta de funcionamiento.
-En ese tiempo yo era la que salía por la puerta principal de la Intendencia a dar la cara cuando estaba Adeoms insultando, nunca me fui por la puerta de atrás, había una manifestación y yo llegaba con mi auto y paraba ahí, y jamás nadie me faltó al respeto.
-¿Por qué aclara que nunca se fue por la puerta de atrás? ¿Alguien salía por atrás y no por el frente?
-Sí, otros salían por atrás.
-¿Quiénes?
-Otros… Varios salían por atrás. No guardo rencor, pero tengo memoria.
-En su columna en CAMBIO, días atrás, donde habla de la decadencia de Salto y su turismo, a Gustavo Chiriff no le cayó bien su comentario, rechazó su acusación.
-Yo me eduqué con Malaquina, y aprendí que Salto debe apostar a un plan de futuro de 30 a 50 años. Lo que veo ahora es que el turismo de Salto no tiene plan de desarrollo hacia adelante. Eso critico.
“Está bien que se hagan baños en las termas,
pero no es necesario promocionarlos”
-Chiriff en una entrevista reciente dijo que ahora Termas del Daymán tiene baños nuevos, se reformaron todos los vestuarios, se hicieron piscinas y que usted se olvidó que en el gobierno de Germán Coutinho el último mes las Termas del Daymán estuvieron cerradas.
-Estuvieron cerradas por problemas con los funcionarios, no por falta de mantenimiento. El problema es que cada uno se pone el sombrero que le corresponde o que quiere ponerse, es por eso que las cosas no avanzan en Salto. No estoy criticando al gobierno departamental que hizo o no hizo una piscina. Hoy el mundo del turismo se mueve a través de los visores de internet, entonces si le sacas a un lugar que tiene termas, el nombre termas, lo vas a ir a buscar y no lo va a encontrar. Hay cosas absurdas que se han hecho en los últimos tiempos. Cambiar por ejemplo el criterio de intentar traer todo tipo de turismo, para pasarse a un turismo social, estoy convencida que eso es un error. Cuando se propusieron trabajar en turismo social para que los ricos vayan a los hoteles 5 estrellas, es un error porque acá tampoco vienen ricos, viene clase media.
-¿Cómo visualiza el turismo actualmente?
-Yo vivo en termas y voy a panadería Don Diego, pregunto cómo venimos de público, y me dicen que está muerto todo, y no se vende nada. Salto perdió esa proyección, en la época de Pedro Bordaberry, Salto tenía Destino Termas, ahora sigue siendo sol y playa, hicieron el Corredor de los Pájaros Pintados que no existe. Además no pueden hablar de desarrollo turístico cuando lo que hicieron fue inaugurar unos baños, es burlarse de la inteligencia de la gente. ¿Cuándo vieron que Altos del Arapey difundiera que hicieron un baño más? No, Altos del Arapey invierte en publicidades y promociones para traer gente de otros lados. ¿Por qué lo público tiene que mirarse diferente de lo privado? Nosotros tenemos que vender Salto, pero primero definir nuestro eje turístico. Está bien que hagan baños y todo lo que quieran, pero no promocionarlo, seguimos sin figurar como Destino Termas. Si uno “googlea” Destino Termas, te manda a Federación o Gualeguaychú, porque nosotros hoy tenemos una competencia que hace 20 años no la teníamos, hay que cambiar la cabeza, hace 20 años nadie iba a Termas de Federación, si no cambia la estrategia y encima le llaman Corredor de los Pájaros Pintados, no existimos. Si se ofenden por eso vamos a seguir retrocediendo, el turismo de Salto tiene que ser política de estado. El BID hace algunos años desarrolló un programa de turismo que marcó lo que es un plan de desarrollo a 30 años, quizás es tiempo de hacer algo parecido con recursos internacionales, para que nos vuelvan a poner en el mapa turístico. Hoy las termas están envejecidas, no lo digo por criticona, yo vivo ahí. No se puede entrar de la tierra que hay, te da ganas de subir a los turistas en la camioneta, van mojados a comer al Rancho, y se tapan de barro, porque no se puede circular, no pasan ni siquiera un regador, el agua servida está en la calle, falta bituminización, no hay saneamiento. Por el barrio La Chinita hay que circular con los vidrios bajos, porque no se aguanta el olor. Los pobres turistas andan caminando oliendo inmundicia.
-¿Qué hicieron con respecto a esto en la época que usted estuvo en la Intendencia?
-Había directores que se encargaban de eso. Nosotros trabajamos fuertemente la difusión de Salto en ese entonces, una de las destrucciones que se hizo fue por pensar en la política menor, y en las elecciones departamentales se habla mal de Salto para afuera del departamento. A Andrés Lima se lo he dicho, puede tener una gran diferencia política con un contrincante, pero no se puede hablar mal del departamento. Hoy la gente viene y dice que Salto “era hermoso”, en pasado, y ahora está horrible, creo que eso realmente nos ha afectado en el turismo, hoy somos un puente, la gente viene de paso para ir a Federación. La gente antes venía a los hoteles y se quedaba 4 noches, hoy se queda una sola, porque es el tiempo que le lleva cruzar a Argentina. Se lo pueden preguntar a cualquier hotelero.
-¿Hay una coalición en Salto?
-Nosotros con Manini tenemos espíritu coalicionista, pero hoy en Salto no hay una coalición. Hay que ser muy claros, porque no podemos jugar al engaño. Para que haya una coalición departamental, tiene que haber un eje programático de cuestiones por el departamento, que tiene que priorizar Salto, y eso hoy no se discute. Tiene que haber una discusión de partidos políticos, no de personas. Se habla de coalición departamental y solo aparecen Carlos Albisu y Germán Coutinho, son dos personas, no son dos partidos políticos Tiene que haber un lema en común, sí, se habla de coalición, pero no se está trabajando en una coalición. Pasará lo que pasó en la elección anterior, llega el último día y no se pudieron armar, no sale nada y gana la fuerza que estaba enfrente. Si esas son las condiciones, no se puede hablar de trabajar en una coalición. Lo que pasó en la elección anterior no fue un error, fueron decisiones políticas personales enfocadas en eso, en lo personal, la cual yo no comparto. Vamos camino a lo mismo, a lo que ya pasó.