El legado artiguista y un compromiso constante
Por Agustina Escanellas
Un día como hoy, pero de 1764, nació José Gervasio Artigas. Podríamos decir que fue un destacado líder militar y político uruguayo del siglo XIX, reconocido por su lucha por la independencia y su defensa de los derechos de los pueblos. Su figura sigue siendo relevante por los valores que defendió y por su legado en la historia de nuestro país y de América Latina.
Artigas es recordado por su visión de un país libre y justo, donde todos los ciudadanos sean iguales en derechos y en oportunidades. Su frase célebre “Sean los orientales tan ilustrados como valientes” refleja su compromiso con la educación como pilar fundamental para el progreso de una sociedad.
El acceso democrático a la formación académica, la descentralización universitaria y la democratización de la información son esenciales para construir una sociedad más equitativa. Ese rumbo es parte de nuestro ser nacional y de nuestra construcción batllista. La enseñanza pública, gratuita y obligatoria, las escuelas de tiempo completo, los CAIF. En la actualidad, lo podemos ver en la reforma educativa impostergable que se viene llevando adelante desde el gobierno contra los conservadores de siempre y en la inversión en primera infancia y fortalecimiento de los planes CAIF, con una inversión que significarán 200 millones de dólares en este periodo de gobierno.
Artigas también enfatizó la importancia de la participación ciudadana y el gobierno basado en el consentimiento de los gobernados. Su lema “Libertad o muerte” refleja su convicción de que los pueblos tienen el derecho de decidir su destino y resistir cualquier forma de tiranía.
Esta idea no pierde vigencia y se hace fuerte en la defensa de la democracia y la búsqueda de un gobierno justo y representativo, en decirle no a las dictaduras y en no decir verdades a medias. Cuba es una dictadura y Venezuela, también.
Esa concepción de libertad que también podemos ver en el manejo de la pandemia, en aperturas comerciales y en el respeto a las instituciones.
El legado artiguista perdura en la memoria colectiva por su visión superadora, justa, y expansiva que nos invita a reflexionar sobre nuestro presente y en el Uruguay de los próximos 30 años. Un compromiso constante que todos debemos asumir.