sábado 2 de noviembre, 2024
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Ambientalistas reclaman por restauración de tierras y resiliencia a la sequía y climas

El 5 de junio se conmemora el Día Mundial del Medio Ambiente. En una entrevista con CAMBIO Adriana Carabajal Conti, secretaria de la Asociación Civil Ambientalista de Salto (ACAS), destacó la relevancia de la campaña de la ONU que se centra en la restauración de tierras, la resiliencia ante la sequía y la desertificación, bajo el lema «Nuestras Tierras. Nuestro Futuro».
PREOCUPACIÓN
“Es irónico reflexionar sobre este lema y tomar conciencia de las acciones que lleva a cabo nuestro país, Uruguay.
Mientras que en regiones como Arabia, donde se enfocan las celebraciones del 5 de junio, es lógico que estén preocupados por subsanar el problema de las tierras y restaurarlas para el futuro, dado su contexto de sequía y escasez de agua. La reforestación es una de las acciones clave en este proceso de recuperación de las tierras. Sin embargo, en Uruguay contamos con tierras excelentes para la producción de alimentos para millones de personas en el mundo, y el agua no ha sido un problema hasta la sequía experimentada el año pasado en la zona sur del país. Se hace evidente la necesidad de reflexionar sobre nuestras prácticas y políticas ambientales para asegurar la sostenibilidad de nuestras tierras y el futuro de las generaciones venideras”, explicaron.
CÓMPLICES Y ENTREGUISTAS
“El problema en nuestro país se deriva del manejo inadecuado del territorio, particularmente en términos de ordenamiento, donde más del 50% de las tierras óptimas para la agricultura y la cría de ganado son asignadas a grandes multinacionales. ¿Acaso no aprendemos de nuestras lecciones pasadas? ¿Y quiénes son los responsables de esta situación?” Se preguntó Carabajal. “Los políticos negligentes, que mediante contratos secretos y cláusulas de confidencialidad están cediendo nuestras tierras, agua y recursos vitales a intereses extranjeros, junto con los productores y empresarios nacionales que, en su afán de lucro, venden sus tierras al mejor postor sin considerar las consecuencias de empobrecer el suelo y entregar el control a poderes externos”.