
Con partidas provenientes de esta zona del litoral norte, sumadas a las del sur del país, se observó un fuerte incremento de la oferta de zapallos en la Unidad Agroalimentaria Metropolitana (UAM) durante la pasada semana. Mientras los calabacines destacan por una madurez comercial óptima, las variedades de Kabutiá enfrentan problemas de inmadurez que afectan su valor en el mercado.
En esta semana, la comercialización de zapallos Kabutiá mostró una reducción de 33% en volumen, con 159 toneladas ingresadas, y una baja del 13% en su precio promedio, situándose en 21 pesos uruguayos por kilogramo al mayorista, con impuestos incluidos. Este descenso se atribuye a que gran parte de las partidas presentaban signos de inmadurez, especialmente las procedentes de Rivera y el litoral norte.
Por otro lado, los calabacines, que ingresaron mayormente desde el sur, ofrecieron partidas sazonadas con buenos niveles de madurez, lo que permitió mantener sus precios estables en 24 pesos por kilo, a pesar de una caída del 28% en volumen respecto a la semana anterior.
Las altas temperaturas y la falta de lluvias han acelerado la maduración en algunas zonas, mientras que, en otras, como el litoral norte, los cultivos no alcanzaron los estándares comerciales ideales.
El mercado general de hortalizas secas reflejó esta semana una tendencia de precios a la baja, en línea con una caída del 10% en el volumen total comercializado en la UAM. Esta dinámica está en sintonía con el descenso del Valor Kilo Canasta (VKC), que bajó un 5,9% respecto a la semana anterior.