sábado 22 de marzo, 2025
  • 8 am

Noche de sparring: Salto practicó fútbol contra Almagro

Sol

A practicar lo importante. Así pareció ser la premisa en la jornada de anoche, en donde hubo un invitado, el club Almagro que busca ser protagonista en el divisional “B” y que vio con muy buenos ojos esa prueba amistosa frente al combinado campeón del Litoral Norte.
La salvedad fue que quienes jugaron en la selección fueron los habituales suplentes, entiéndase, Leonardo Fagúndez, Walter Campos, Ignacio Bueno, Nicolás Cáceres, Sebastián Pintorelli, Santiago Díaz, Facundo Gómez, Diego González, Gabriel De Souza, Alan Aranda y Matías Batista. Estos últimos dos tal vez los “no tan suplentes” dada la grandes dosis de minutos que obtuvieron a lo largo del torneo regional.
¿El resto del plantel se ausentó?. Para nada. Estaban al margen del terreno de juego siendo atendidos por el equipo de masajista y kinesiólogo del cuerpo técnico. Entre camilla de masajes recuperatorios e inmersión en tanques con agua helada, los titulares realizaron la terapia correspondiente para ponerse en forma de cara a lo que se viene.
MUCHO JUEGO POR LAS BANDAS, VARIOS PUNTOS ALTOS
Si bien es cierto que el rival, al menos en teoría, está varios escalones por debajo, conviene reconocer puntos altos. Tales fueron casos como Ignacio Bueno, Sebastián Pintorelli y Nicolás Cáceres, ¿tendrán más minutos en la fase de la Copa Nacional?. Demostraron estar físicamente bien y sobre todo, cada uno en su puesto, sobriedad. Bueno, por ejemplo, se mostró sólido en defensa cerrando varias situaciones de gol. Cáceres no escatimó esfuerzos en ganar la banda zurda y aunque se equivocó en algún centro, fue una constante herramienta ofensiva corriendo desde su sector del campo. Pintorelli manifestó llegada y definición, medios que pueden ser claves en partidos que se presumen serán parejos y cerrados, y en donde saber meterla entre los tres palos podría llegar a convertirse en algo más valioso de lo que ya es. ¿La forma de juego? La conocida. A Rony Costa le gusta usar los costados, atacar por las bandas, tener un doble cinco que haga circular la redonda para que quienes tomen las puntas puedan explotar los espacios. En este punto, tanto los suplentes como los titulares supieron engranar el estilo del director técnico. Problemas de filosofía entre oncenas no deberían de haber. Salto parece ser una garantía en ese punto.