lunes 19 de mayo, 2025
  • 8 am

Chofer sufrió una descompensación y perdió el conocimiento unos segundos

Avisos judiaciales

Tras el despiste y vuelco del ómnibus de Agencia Central que había salido de Salto a la hora 0 del viernes con 58 pasajeros a bordo, se realizaron las pericias necesarias para saber qué fue lo que ocurrió. Al menos 15 pasajeros resultaron heridos y debieron ser trasladados a centros asistenciales de Flores tras el accidente que ocurrió en ruta 3 en las inmediaciones de la ciudad de Trinidad. El conductor del ómnibus -un hombre de 59 años- perdió el control y terminó volcando sobre uno de sus laterales.
SÍNCOPE
El chofer fue uno de los lesionados tras el accidente y si bien fue asistido en Trinidad, fue trasladado a Salto en la jornada del sábado, donde se le hizo una valoración médica sobre su estado de salud. Según confiaron fuentes médicas a CAMBIO, el hombre dijo que viajaba muy bien cuando en determinado momento sintió ganas de toser y no recuerda más nada. Esto podrían indicar -según se nos explicó- de un síncope que podría deberse a una falla cardíaca, aunque la última valoración médica sobre su condición física fue totalmente normal. Cabe aclarar que los choferes se someten e evaluaciones médicas recurrentes para determinar posibles problemas de salud. Tras perder por algunos segundos el conocimiento, el chofer relató que despertó cuando el vuelco ya había ocurrido.
“FUE CAÓTICO”
Testigos aseguran que el siniestro se produjo en una zona donde se realizan obras de reparación y donde se ha construido un badén con barandas de hormigón, lo que podría haber influido en la maniobra fallida. Zulma Guarino, una de las pasajeras que viajaba con su esposo desde Salto hacia Montevideo para celebrar el cumpleaños de su nieto, dijo que el impacto se produjo tras cruzar la senda hacia la izquierda. El vehículo habría chocado con una de las barandas metálicas ubicadas en el borde del camino y cayó por una pendiente de más de dos metros de altura, deslizándose de costado varios metros. “Cuando caímos, todos terminamos amontonados a la izquierda. Encima mío quedaron tres mujeres, una gritaba que no podía respirar, otra decía que le dolía la pierna… Fue un momento muy caótico”, recordó.