domingo 10 de agosto, 2025
  • 8 am

¿Hasta cuando el mundo permitirá este genocidio?

Daniel Dalmao
Por

Daniel Dalmao

25 opiniones
Avisos judiaciales

Por Daniel Dalmao
¿Los humanos, nos estaremos volviendo inmunes al horror que debería provocarnos ver día a día como Israel masacra al pueblo palestino?
El punto de referencia para los análisis que se hacen de la situación que se está viviendo actualmente en Palestina es, mayoritariamente, el 7 de octubre de 2023, día en el que la organización Hamás atacó a Israel provocando más de 1000 muertos y secuestrando a otros 250. A partir de ahí “comenzó” la respuesta israelí, la que ya dura casi dos años.
Ahora bien, ¿es correcto tomar ese punto de partida? ¿Todo comenzó el 7 de octubre? ¿Esto es solo una respuesta legítima por parte de Israel a un ataque terrorista? El intelectual Ilan Pappé (nacido en Israel en 1954) propone otra cosa, para él la mirada debe ser más larga en cuanto a período histórico a considerar para poder comprender lo que está pasando hoy.
Pappé define la política israelí en la Franja de Gaza como un “genocidio progresivo”. Esta definición ya la hizo conocer en un artículo del 2006 y la retomó en “Conversaciones sobre Palestina”, un trabajo publicado junto a Noam Chomsky en 2016. Allí dice a continuación, “El término es importante, ya que ubica adecuadamente el brutal accionar de Israel a lo largo del tiempo dentro de un contexto histórico más amplio”. Un profesor israelí lo dice por lo menos desde 2006 y nosotros aquí hoy, ¡nos “debatimos” en torno a, si nos animamos a acusar al gobierno de Israel como genocida o no! en ese ensayo, Pappé también pone el foco sobre como a lo largo de la historia Israel usa un hecho fortuito, concreto, como excusa para ir hacia una etapa más de ese “genocidio progresivo”. Porque el objetivo es hacer desaparecer al pueblo palestino o desplazarlo lo más lejos posible.
También parece ser progresivo el horror provocado, la maldad y la saña con que se actúa. La violencia ejercida sobre civiles, mujeres y niños es incalificable. Primero fueron las bombas, los tanques, los fusiles, ahora el arma mortal usada sin discriminación ni piedad alguna es el hambre. “Gaza está al borde de la hambruna. Los hechos están ahí y son innegables. Los palestinos de Gaza están sufriendo una catástrofe humanitaria de proporciones épicas” (Antonio Guterrez, Secretario General de la ONU). Por lo menos 16 niños murieron de hambre en la segunda semana de julio, más de 1200 personas han sido asesinadas por disparos del ejército israelí mientras intentaban recoger comida desde que a finales de mayo comenzó la distribución de asistencia humanitaria bajo control militar, tras dos meses de bloqueo total.
Michael Fakhri, relator especial de la ONU sobre el derecho a la alimentación declaró: “Israel ha construido la maquinaria de hambruna más eficiente que se puede imaginar. Así que, aunque siempre es impactante ver a la gente morir de hambre, nadie debería sorprenderse. Toda la información ha estado a la vista desde principios de 2024” “Israel está hambreando Gaza. Es genocidio. Es un crimen de guerra” (la diaria 5/08).
Desde el propio interior de Israel se están oyendo voces contrarias al accionar del gobierno comandado por Netanyhu. “Escribimos esto con profunda vergüenza, rabia y dolor. Nuestro país está matando de hambre a la población de Gaza y considera la expulsión forzosa de millones de palestinos de la Franja. La comunidad internacional entera debe imponer sanciones abrumadoras a Israel hasta que ponga fin a esta brutal campaña e implemente un alto al fuego permanente”, carta firmada por figuras públicas israelíes como políticos, científicos premiados y artistas destacados (Brecha, edición 2071).
El maestro Alfredo Zitarrosa nos sigue diciendo/reclamando: “Hago falta/yo siento que la vida se agita nerviosa sino comparezco/Si no estoy/ Siento que hay un sitio para mí en la fila/ Que se ve ese vacío”.
Que no se vea más ese vacío.