domingo 22 de diciembre, 2024
  • 8 am

Le ataron manos y pies, lo rociaron con combustible y le prendieron fuego

El revoltijo

José Enrique Graces tenía 74 años, y administraba una pensión, en la calle Julio delgado a la altura del 100, a una cuadra de su casa, y ayer a las 09.00 de la mañana fue encontrado muerto, atado de pies y manos, con un trapo en la boca, el cuerpo quemado y un principio de incendio en la casa.
El macabro hallazgo lo hizo la señora que le realizaba la limpieza de la casa, quien recurrió a en busca de auxilio a los funcionarios de una obra en construcción del frente de la casa. Los funcionarios de la obra llamaron a la policía y los bomberos.
El caso conmocionó al barrio debido a que se trata de un hombre que durante toda su vida vivió en la zona y era estimado por todos los vecinos del lugar.
CHEQUEAN CÁMARAS DE
SEGUIRIDAD DE LA ZONA
Según la información en poder de CAMBIO el cuerpo del infortunado hombre fue encontrado con las manos y las piernas atadas con cables, tenía un trapo en la boca, pero no presentaba violencia física. La información aportada a nuestros cronistas por el vocero interino de la Jefatura, Marcelo mac Eachen, el cuerpo de Gracés fue roseado con combustible y prendido fuego, por lo que presentaba múltiples quemaduras. Los autores del hecho dejaron las cuatro hornallas de la cocina emanando gas, por lo que los investigadores intuyen que pretendían provocar un incendio de mayores proporciones, pero el fuego no se propagó. Gracés no contaba con antecedentes, ni estaba involucrado en hechos, ni en ambientes que pudieran ser un indicio que lleve al esclarecimiento de su homicidio. Esto, mas el hecho que administraba una pensión – lo que genera la posibilidad que pudiera contar con algún dinero guardado en su casa -, lleva a los investigadores a pensar que el móvil del asesinato pudo ser el robo. Los datos recogidos por CAMBIO dan cuenta que la policía ya está trabajando en algunas líneas de investigación con el relevamiento de cámaras de video vigilancia existentes en la zona, y recogiendo el testimonio de vecinos del lugar y de algunas personas que asiduamente tenía contacto con él.