Armando Guglielmone
Instructor canino – educador etólogo
Venta de ovejeros alemanes de pedigrí
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Escribir sobre que razas de perros es recomendable tener o no está supeditado a las prestaciones que este nos puede dar y tomando en cuenta una crianza bien asesorada y llevada a cabo por sus dueños. Pero la mayoría de las personas cuando adquiere un perro lo hace llevado por sus gustos personales y estéticos, es decir, conseguirá el perro que más le guste como se vea y listo. Tomando en cuenta estos, los que fueron adquiridos o aceptados por decisión exclusiva de sus propietarios, se me ocurrió numerar los que más problemas les han presentado sobre todo respecto a su comportamiento. Acá dejaré de lado los perros sin raza determinada ya que en estos casos hay otras variables más complicadas que pueden influir. No está esto basado del más complicado al menos o a la inversa, están nombrados al azar. Si hay una raza de perro que he visto a lo largo de los años que las quejas son constantes y casi siempre por los mismos motivos es sin duda el Beagle, estos perritos, adorables a simple vista, tienen la particularidad de ser excelentes fuguistas y tienen una tendencia a destrozar todo lo que tengan a su alcance si no hallan una manera productiva de liberar el estrés. Su nariz los controla, la capacidad olfativa que tienen es tan alta junto a sus instintos de caza que cuando encuentran un olor que les parezca interesante van tras este, de nada valdrán las llamadas del dueño, haciendo oídos sordos irán tras la fuente de este. Debe ser la raza que más me han dicho que lo quieren regalar y nunca es por su comportamiento con la familia, no he conocido uno que haya mordido a alguien, pero su intensidad termina sobrepasándolos. Otra es el Bulldog francés, particularmente los machos. Acá sí que hay problemas de comportamiento. Estos tienen una alta tendencia a ser de carácter dominante y cuando no lo son de manera pasiva se les complica a los dueños. Es frecuente que los propietarios se quejen de que los amenazan con gruñidos e incluso que les tiran mordiscos, a ellos o a quien se lo merezca, desde su punto de vista, claro. De confrontar perros mucho más grandes que ellos en la calle o con otros que conviva, haciéndole ver a quien quiera manipularlo las consecuencias si es que él no quiere, así será. La otra es sin duda el Boyero australiano, este singular perro que siempre llama la atención debido a los colores de su manto es un perro rústico, de carácter fuerte, independiente y que no puede estar ocioso. Los machos han mostrado una conducta confrontativa con sus dueños si este pretende dominarlo y con otros perros se han mostrado agresivos si el otro perro se muestra amenazante. Al ser de carácter independiente es normal que hagan oídos sordos de sus dueños si están enfocados en algo que les interese, esa es su normalidad. Y así terminaría esta observación sobre las razas que, a medida que han pasado los años y los perros adiestrados, he visto que son las que más frecuentemente han dado más problemas a sus dueños, no es una evaluación personal ni una recomendación sobre que perro nos convendría no tener, pero, sin duda sería bueno que tomaran en cuenta.
