Dr. Álvaro Lima
Diputado FA Salto
La etapa del final siempre es determinante. En cualquier orden de la vida va pautando ese temple de la regularidad y perseverancia que solamente allí; en el final, aflora.
Por éstos días se estará retornando al desarrollo de todos los servicios que brinda la comuna a la sociedad, abrirán sus oficinas y sin apartarse de los protocolos sanitarios, se podrá concurrir a cumplir con los trámites cotidianos y desde la administración, se esperan días y semanas de inyección de actividad y trabajo.
La coyuntura de la pandemia del Covid 19, ha puesto a todas las Intendencias del país en una idéntica posición de dificultades para la cobertura de sus servicios, al verse afectado el número de funcionarios a disposición de la comunidad.
Aquí en Salto, durante estos meses, se sostuvieron las guardias laborales y se priorizaron las áreas esenciales como recolección de residuos, ómnibus, alumbrado público y alguna cuadrilla del departamento de Obras que nunca cesaron en su labor.
Ese es un aspecto a destacar sin duda alguna. La valentía de funcionarios que mantuvieron la llama viva en épocas de prevención y temor, la comprensión desde la administración Andrés Lima – Alejandro Noboa en cuanto a seguir adelante porque siempre hay que responder.
Esta apertura permitirá, además, a Salto y a todas las intendencias uruguayas volver progresivamente a activar la recaudación por concepto de tributos, patentes de rodados, servicios de la clínica, de semovientes, del Registro Civil; entre otros.
Una economía que necesita de ingresos para afrontar los meses venideros con tranquilidad y que permita seguir confirmando esa seguridad y confiabilidad que desde antes de asumir, en julio de 2015, marcó un rasgo saliente de la actual administración.
La falta de pago, la insolvencia financiera, los incumplimientos, las deudas, los balances escandalosos; no son dela actual gestión departamental.
Pese a que, en los últimos tiempos, en forma sistemática e insistente, la oposición política en Salto ha pretendido achacar lo que nunca ha sido parte de la identidad de este equipo de gobernanza. De ésta administración frenteamplista histórica en alcances y obras.
Justamente, ha venido a ocurrir lo que otra coalición no supo ni se importó. Se ha venido a restaurar lo que antes colapsó, a pagar salarios incluso antes de asumir constitucionalmente el mandato en julio de 2015, porque los de antes se declararon en cesación de pago.
Dificultades han existido siempre, todos y todas las tenemos, convivimos con ellas pero ante todo ponemos responsabilidad y nos esmeramos en salir adelante.
Algo de todo esto último desborda en la gestión de gobierno departamental actual que empieza a divisar el epílogo.
Apertura, cercanía, obras, innovación con el sistema de contenedores, la iluminación Led que cubre lentamente toda la ciudad y la renovada flota vehicular municipal en un 100% o reducción en más de 20 puntos porcentuales del rubro cero (presupuesto de salarios de funcionarios) estarán en la rendición de éste período inolvidable.
El saneamiento en varios barrios salteños, recuperación del grado inversor (carnet de salud del buen pagador), la refinanciación hasta el año 2031 de la gigante y aún dolorosa deuda de los irresponsables que precedieron a la gestión actual de la sensatez; serán algunos de los inolvidables logros.
Cerca del final, seguimos confiando en quienes han traído la paz a un Departamento que había apretado su alma a las angustias del pasado.
Y casi al lado de ese final, está el 27 de setiembre del cara a cara con la urna de votos. Pero esa, es otra historia en la cual nos vamos metiendo.
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