Dialogamos con uno de los jugadores salteños que militan en Rampla Jrs de Montevideo, quien nos habló sobre sus inicios en el fútbol y su presente previo al inicio de Segunda División Profesional.
-¿Desde cuándo en el fútbol profesional?
-Me vine muy chico con aproximadamente 15 años para integrarme a las formativas de Danubio.
-¿En qué equipos hiciste el baby fútbol en Salto?
-Mis primeros pasos fueron en Universitario en el CRES y luego me fui a Deportivo Artigas debido a que a mis padres se les dificultaba bastante llevarme a los entrenamientos por un tema de distancia. En Deportivo jugué en todas las categorías hasta llegar a primera división.
-¿Entrenadores del baby fútbol que te hayan marcado?
-El flaco Farinha y Julio Argain han marcado mis primeros pasos en el fútbol salteño.
-¿Aún tenés contacto con chiquilines que compartiste planteles en el baby de aquí de Salto?
-Tengo contacto con Bruno Viera, que estuvo jugando en Universitario. Fueron momentos lindos y siempre el fútbol te deja buenas amistades.
-¿Qué recuerdo tenés de tu llegada a primera división con apenas 15 años en Deportivo?
-Sin ninguna duda que fue muy lindo llegar a primera división, me ha tocado jugar con Ángel Flores, Martín Curbelo, Martín Suárez, Gabriel Monzón, entre otros. Recuerdo que debuté en cancha de River Plate contra Tigre, ingresé en el segundo tiempo y convertí para darle la victoria a mi equipo. Las veces que voy a Salto, hago lo posible de ver a muchos de ellos y charlar sobre fútbol.
-¿Cómo se dio tu pasaje a la capital?
-Desde que estuve en inferiores ahí en Salto, comenzaron a seguir mis pasos a través de una selección que integré de 12 años. A partir de ese momento tuve la chance de ir a Montevideo y comenzar a realizar pruebas junto a otros chicos del interior.
Me presenté a la prueba, quedaron conformes con mi desempeño y me dijeron que más adelante llegaría de forma definitiva a incorporarme a sus planteles. Arturo Del Campo era el coordinador de formativas de Danubio y junto a otros dirigentes avalaron mi posible llegada.
-¿Cómo llegas al plantel de primera división en Danubio?
-Tuve buenas temporadas en tercera división, a partir de ahí me vio Leo Ramos que era el entrenador de primera división y me dio la posibilidad de ganarme un lugar en el plantel de primera división.
-¿Cuáles son las sensaciones para un jugador de “tierra adentro” llegar al profesionalismo?
-Se siente muy bien, a pesar de que no es fácil el camino por recorrer para un futbolista que apuesta a llegar a lo más alto de la carrera. Uno se acostumbra a estar mucho tiempo sin ver a la familia, debemos ser perseverantes, mantener cierta disciplina y esforzarnos al máximo para poder estar donde queremos estar. Son sentimientos encontrados en ciertos momentos, porque hay veces que las cosas no salen como uno quiere y frente a eso hay que recomponerse rápido.
-¿Compartiste planteles con otros salteños?
-Es así, en el 2013 como así también en el 2014 donde fuimos campeones, tuvimos una banda salteña muy unida: Fornarolli, Formiliano, Matías De Los Santos, Ardaix que venía jugando a muy buen nivel en inferiores y luego explotaría en primera.
-¿Cómo fue tu experiencia de ser dirigido por Juan Ramón Carrasco en tu pasaje por River Plate?
-La verdad que muy buena, en mi caso que juego como delantero aprendí muchísimo al tener la chance de asimilar las indicaciones de un ex jugador y gran entrenador. Si estás dispuesto a escucharlo, aprendes muchas cosas que te sirven como jugador dentro de un campo de juego.
¿Pensás en la posibilidad de llegar al exterior?
-Por supuesto, lo importante hoy es el día a día, sentirme bien, cómodo, tener la regularidad necesaria para poder mostrar mi fútbol y con el tiempo lógicamente esperar trascender fuera de fronteras.
¿Tendrás a ex jugadores de la selección salteña a tu lado?
-Sí, son dos grandes refuerzos para el equipo. En el caso de Richard Rodríguez lo conocía de ir a ver a un amigo que jugaba en Universitario y respecto a Paolo Dantaz lo conocí por su pasaje aquí en la capital en Rentistas. Entablamos una linda relación, una vez que culminan los entrenamientos los llevo en mi vehículo al lugar donde se están hospedando los dos y dialogamos bastante sobre el presente que nos va tocando.
