Por Juan Carlos Ambrosoni
El Uruguay presenta un escenario que en estas últimas semanas que ha tomado más fuerza y repercusión que nunca, una coyuntura de esas por ejemplo en 1992 en torno a la ley de empresas públicas. El tema ha ganado la atracción de la sociedad porque tienen la decisión del pueblo en el desenlace y habrá vencedores y vencidos. Este panorama tiene como protagonistas al Gobierno, a la oposición Frenteamplista y al PIT-CNT. Se trata del camino a la Consulta Popular, del uso de la democracia directa, consiste en esta ocasión de la etapa final del proceso a derogar 135 artículos de la Ley de Urgente Consideración 19.889 (LUC) por parte de la intersocial apoyada por el Frente Amplio (FA) y las organizaciones adeptas a la susodicha. Queda poco tiempo para recolectar las firmas y se conocerán los resultados de lo que es la primera gran disputa entre la izquierda uruguaya y el oficialismo.
Aprobada la ley en Julio 2020 sus más de 400 artículos han traído consigo una ola de debates en todo tipo de ámbitos a lo largo y ancho del territorio nacional, desde por qué se aprobó en plena pandemia hasta la necesidad de la misma para la administración, la realidad es que la herramienta de la coalición rige y funciona. Por ende, la intersocial, con el soporte de la oposición Frenteamplista, está al firme con su objetivo de derogar 135 artículos de la mencionada norma. Los mismos están presentando una enorme maquinaria política y militante para convencer y juntar alrededor de 700.000 firmas, aunque son 670.000 las necesarias para trasladar a las urnas a la ciudadanía y manifestar su acuerdo o no a la derogación. La Central Sindical y el FA ven la importancia de este último tiempo que queda para recolectar adhesiones, han manifestado que es un desafío, ya que marcará el nivel de aceptación popular con que cuentan. La estrategia izquierdista de llegar a cada rincón del país se desempeña de gran manera con su fuerte militancia convenciendo a los uruguayos ante una falta de diálogo entre el gobierno y la sociedad a la hora de llevar adelante la LUC, sobre su calidad de “ley ómnibus” en tantas razones que su perspectiva posee
Apenas pasamos el año del quinquenio gubernamental y al arriba al rojo vivo tenemos la situación que fija la primera puja de fuerzas entre gobernantes y opositores. Este hecho trata sobre la lucha por marcar poder que hay detrás de los objetivos que tenga la Intersocial. Apoyados por el FA, actuando de manera cohesionada sistemáticamente, es como estos buscarán hacerle contrapeso a la coalición multicolor. Si se llegan a los autógrafos necesarios para que se realice la consulta popular, será la ratificación de la fuerza que posee el PIT-CNT en la sociedad, afirmando la credibilidad de su relato de que si son representantes de gran parte de los uruguayos, de que si era cierto de que no se escucho a la población cuando se trataba la ley. Pero lo que marcará a fuego la arena política radica en si lograda la recolección de firmas y por ende llevada la ciudadanía a las urnas, la misma opte por derogar o no los 135 artículos que se quieren extirpar. La reivindicación del gobierno o el apoyo ciudadano que tiene la izquierda está en disputa, uno de los dos, dependiendo de los resultados, obtendrá una trascendental victoria en su mano a mano.
Según la oposición, se van juntando poco más de 445.000 firmas a falta de 19 semanas para que culmine el plazo de recolección ¿Llegarán?
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