Por Gustavo Chiriff
Pasada la pandemia, que llevó a una inactividad nunca experimentada antes en lo que respecta al sector turístico, con fronteras cerradas y restringida movilidad interna, el 2023 muestra en tendencia una recuperación lenta de los flujos turísticos en nuestro país.
La caída sufrida en el 2021, con prácticamente nulos datos sobre ingresos de turistas, de turismo receptivo de extranjeros y de turismo interno, el 2022 tuvo una caída del 64 % en el total del país y particularmente en el litoral termal (como mide el MINTUR), la caída fue del 76 %. Esto también se traslado a lo que fue el gasto en dólares, en el destino, para el mismo periodo la caída en el total del país fue del 51 % y en el litoral termal del 71 %. Sin dudas que esta situación impacto profundamente en el sector, tanto en empresas como en trabajadores.
Si analizamos este primer trimestre del año, respecto a la cantidad de visitantes, el litoral termal sigue siendo el tercer destino turístico en Uruguay, ubicándose primero Punta del Este con 343.870 turistas, seguido de Montevideo con 188.802 y litoral termal con 151.979.
La cantidad de turistas de este primer trimestre son más bajas que en igual periodo del 2018, pero algo más que las del 2019. El principal emisor de turismo receptivo sigue siendo Argentina. En cantidad de visitantes, en este primer trimestre de 2023 ingresaron cerca de 715 mil argentinos a territorio uruguayo y cerca de 150 mil brasileños. Dentro de la región, paraguayos y chilenos sumaron, divididos en partes casi iguales, otros 50 mil, y del resto de América otros 50 mil. Los europeos aportaron 50 mil visitantes y los norteamericanos 30 mil.
Visto desde la cantidad de visitantes, se aprecia una lenta recuperación a valores prepandemia, pero se viene evidenciando una disminución en lo que respecta al gasto, siendo esta temporada la más baja en términos de divisas de los últimos años (los mayores gastos se registraron en 2017 y 2018 con cerca de 1100 millones de dólares), alcanzando los 740 millones de dólares. Sin dudas que lejos esta de ser la mejor temporada anunciada por el sub secretario del Ministerio de Turismo.
Si comparamos este primer trimestre con respecto al primer trimestre del 2018, el gasto de turistas cayó un 32 % y con respecto al 2019 un 5 %. Para el destino litoral termal, para iguales periodos, disminuyó respecto al 2018 un 45 % y respecto al 2019 un 34 %. El gasto por persona en el destino, en Uruguay, disminuyó en un 15 % respecto al 2019 y para el destino litoral termal, disminuyó en el orden del 40 %.
Estas últimas cifras son luces rojas en la actividad turística, porque, si bien hay una lenta recuperación del sector, se da un retroceso en lo que refiere específicamente al gasto del turista en el destino.
Particularmente en Salto, si medimos las dos temporadas fuertes de este año, en Carnaval se vendieron un 12 % menos de entradas que en el 2019 en Termas del Daymán y en semana de Turismo un 17 % menos, notándose también (aunque no lo medimos) una fuerte disminución del gasto del turista en el destino.
Sin dudas, que está influyendo mucho en este comportamiento las diferencias cambiarias con los vecinos de Argentina y Brasil, por lo cual es fundamental aunar esfuerzos entre lo público y lo privado buscando poder atraer al turista al destino brindándoles oportunidades.
