martes 7 de mayo, 2024
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El tiempo

César Suárez
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César Suárez

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Por el Dr. César Suárez
No sé qué le sucedió a esta semana que se me pasó casi sin darme cuenta ¿será que las semanas, a través de tiempo, cada vez duran menos?
En este instante que me he puesto a escribir en mi computadora, me encuentro siendo sábado casi once y media de la mañana y me doy cuenta que no he escrito nada para mi columna semanal del Diario Cambio, ¿ya es sábado? ¿y qué pasó con el resto de los días?, ¿en qué se me gastaron? Bueno sí, he estado de licencia y casi no me estoy dando cuenta en que día vivo aparte que al inicio de semana comencé con intenso dolor de garganta y dolores musculares que rodeaban todo mi cuerpo. El miércoles 18 de octubre, coincidiendo con el Día Mundial del Dolor, no había cosa que no me doliera, aunque de eso, ahora ya estoy bien.
Sea como sea, de algún modo, tengo que cumplir con mi compromiso acordado de palabra con el diario hace 28 años de aportar una columna semanal tal como corresponde. Ahora me doy cuenta que ha trascurrido todo este tiempo, pero al recordarlo no parece tanto.
Como todo acontecimiento, breve o prolongado, siempre tiene un inicio y ahora estaba recordando cómo había comenzado todo.
Era el año 1995, el Centro Médico tenía su área administrativa en la calle Uruguay Larranaga, donde ahora funciona ANDA, el Dr. Álvaro Vero era el director técnico y ahí tenía su oficina, yo había concurrido allí por asuntos del momento, ocasión en que me dijo, tengo que ir a una entrevista con el director del Diario, don Carlos Artía y me preguntó si lo quería acompañar. CAMBIO tenía en ese entonces su oficina en la calle Uruguay a media cuadra de donde estábamos y allí fuimos, el Dr. Vero me presentó y a continuación le dijo, tú me habías pedido a un médico para escribir artículos en el diario, y sin dejarme reaccionarle dijo, aquí te lo traje, ah, muy bien dijo Artía, y a continuación me dijo ¿Cuándo empezamos? Yo me rasqué un poco la cabeza, aunque no me picaba, sobre todo porque no sabía que responder ante la sorpresiva instancia.
Mi respuesta fue, déjeme pensar y no lo pensé demasiado y poco tiempo después con publicaciones los días miércoles que más tarde se trasladó para los días domingos hasta el día del hoy.
Hay una frase hecha que todo el mundo la repite “cómo pasa el tiempo” una sensación tan subjetiva difícil de interpretar.
Hay quienes filosofan pensando que el tiempo no existe, y que no es otra cosa que una construcción mental y así como en el espacio interestelar no existe ni el arriba ni el abajo, el tiempo es sólo una percepción humana que suena tan real que el hombre ha inventado herramientas para medirlo.
¡Vaya uno a saber!
Pero a nivel personal, la percepción de transcurso del tiempo adquiere dimensiones absolutamente relativas. A mí se me paso esta semana casi sin darme cuenta y se vino el sábado encima, así como si nada.
Para la percepción subjetiva, es claro que existen 2 clases de tiempo, el tiempo de espera que por más que uno mire el reloj parece que nunca pasa y otros que se aceleran tanto que uno puede creer que ya hace tanto tiempo de sucedido.
Para los fanáticos de fútbol, siempre hay 2 tipos de tiempo, el tiempo de la espera que comience el partido que parece que el reloj no se mueve y el tiempo del final del partido, si vas ganando por un gol y faltan 5 minutos para que termine, el minutero casi ni se mueve, pero si vas perdiendo por un gol, los minutos trascurren a toda velocidad y el gol no llega.
Y hablando de fútbol y del tiempo, aviso que ya se me hizo tarde, me voy a la tele a mirar un partido que ya está por comenzar. Después veré que escribiré para la columna de este domingo.