Por Carlos Silva
El 2024 es año electoral y ya se vienen perfilando los distintos candidatos hacia lo que son las próximas elecciones internas de Junio próximo. Los uruguayos deberemos elegir a los candidatos únicos de cada partido pero este, es solo el primer paso en la carrera electoral hacia la presidencia. Nuestro país va a estar eligiendo mucho más que legisladores o nuevo Presidente, decidirá cómo quiere seguir por los próximos 30 años.
Sera la decisión más importante que debamos tomar como sociedad ya que claramente tenemos dos opciones, la de profundizar los cambios eligiendo el camino trazado por el Presidente Lacalle Pou y la coalición de gobierno o retroceder y volver a la era del Frente Amplio, tan simple como eso.
Nosotros somos firmes defensores del gobierno actual, porque somos parte del mismo y porque trabajamos para lograr este cambio, pero, sobre todo, porque estamos convencidos que es la mejor decisión que podemos tomar. Seguramente muchos no opinen lo mismo, pero como debe ser en democracia, lo respetamos, pero no compartimos e intentaremos brevemente, dar algunos ejemplos del porqué.
Podríamos elegir comenzar hablando de lo malo que fue para nosotros el gobierno anterior, pero seguimos eligiendo el camino de “la positiva”, defenderemos lo que creemos que hizo bien este gobierno.
Un de las cosas más importantes para nosotros, es la transparencia con que se ha manejada el poder ejecutivo, en el acierto o el error, pero siempre se dio la cara. Desde los comienzos en plena pandemia, cuando muchos llamaban al encierro y cuarentena obligatoria, acá se optó por la libertad responsable, todos los días informaba a la población de la situación de pandemia, para nosotros normal, pero en muchos países no fue lo que vivieron.
Luego la sinceridad para enfrentar los cambios necesarios para el Uruguay sin medir costos políticos, desde la LUC en adelante siempre se jugó con cartas vistas y con la verdad, mientras que otros eligieron el camino de la mentira o el relato catastrófico y que luego, se demostró que nada de lo que pronosticaban pasó.
La reforma de la seguridad social y de la educación, tan esperadas y necesarias desde hacía muchos años, se discutió, se aplicó las mayorías y se llevaron adelante, los resultados los veremos en unos años, pero no tenemos dudas, que vamos a estar mejor que hoy.
Las crisis hídricas, sequias de verano o de invierno o el problema con el agua en la capital, al punto que algunos hicieron política con eso. Quedo al descubierto que quienes llegaron hasta decir que iban a nacer niños deformes, fueron los principales responsables de no haber previsto esto hace años como se sabía y prefirieron hacer un ANTEL ARENA.
Estos son solo algunos ejemplos de porque no podemos retroceder, no podemos volver atrás para no involucionar, pero, sobre todo, para poder seguir avanzando por el camino trazado, por esto y mucho más, en 2024, ni un paso atrás.
