Por Andrés Torterola
Dio inicio la Asamblea Técnico Docente (ATD) Nacional Extraordinaria, en instalaciones del Hotel Horacio Quiroga de la ciudad de Salto y estarán sesionando hasta el viernes 6 de septiembre. En la ceremonia de inauguración estuvo presente Julián Mazzoni, consejero del CODICEN electo por los trabajadores.
POLÍTICAS EDUCATIVAS
En una entrevista con CAMBIO, Mazzoni explicó que la reglamentación de las ATD establece que estas deben reunirse ordinariamente una vez al año, pero pueden hacerlo de manera extraordinaria en casos especiales. En esta ocasión, la Dirección Ejecutiva de Políticas Educativas ha propuesto nuevos programas para 5° y 6°, así como para 2° y 3° año de Bachillerato, y ha planteado algunas modificaciones para los programas de Educación Básica Integrada (EBI). Dado que la ley exige que las modificaciones de planes y programas sean sometidas a consideración de las ATD, se realizó esta convocatoria extraordinaria.
PRINCIPAL PREOCUPACIÓN
El consejero explicó que el trabajo previo que han tenido los dirigentes de las ATD es muy acotado para estudiar programas extensos y que son fundamentales para la transformación en bachillerato, de todas formas, ha sido una actitud permanente de la dirección ejecutiva de políticas educativas que ha respaldado la mayoría del consejo directivo central. Mazzoni, por su parte, expresó su respaldo a la permanencia y profundización de este espacio durante la asamblea. Señaló que una de las principales preocupaciones de los docentes es la falta de participación y de contacto permanente con las autoridades, quienes han ignorado sistemáticamente el aporte de las ATD desde el inicio del proceso de transformación educativa, especialmente en lo relacionado con el marco curricular nacional, las proyecciones de aprendizaje, y otros aspectos claves.
DIFICULTADES EN EL NIVEL TERCIARIO
Las modificaciones del ciclo básico (1°, 2° y 3° de secundaria y UTU), que con la transformación educativa ahora se denominan 7°, 8° y 9°, se implementaron simultáneamente en todo el país. Esto ha afectado a estudiantes de 8° y 9° grado que venían cursando 1° y 2° año bajo el antiguo sistema, y ahora deben continuar sus estudios en el nuevo sistema. Este cambio ha generado preocupación, ya que se considera un mecanismo inadecuado. Una situación similar ocurrirá con los estudiantes actuales de 5° y 6° año, que pasarán a ser 2° y 3° año de bachillerato bajo el nuevo régimen. Además, se prevé que los alumnos que terminen el bachillerato este año podrían verse obligados a cursar 6° año bajo el nuevo sistema. Las inquietudes son compartidas por los docentes, quienes temen que las modificaciones, al ser significativas, puedan generar dificultades para que los estudiantes accedan posteriormente al nivel terciario.
VOLVER AL SISTEMA ANTERIOR
Es fundamental considerar posibles modificaciones de enfoque para revertir este proceso, lo que podría implicar regresar temporalmente al sistema anterior. Sin embargo, no se debe cometer el mismo error de hacerlo sin una consulta previa a las ATD y a las organizaciones gremiales que representan a los docentes. “Si el espíritu lo requiere, será necesario modificar radicalmente el enfoque que se ha dado a la transformación educativa, la cual ha dejado de lado contenidos muy importantes”, concluyó.
