Por Melisa Ferradini.
La pedicura no se limita solo a las uñas, las células de la piel de la parte inferior de los pies, en general muertas, son limadas con una piedra rasposa llamada piedra pómez. Además, los cuidados de la pierna por debajo de la rodilla se han convertido en un tratamiento común y ahora se espera de servicios incluidos en las pedicuras. La cura de las piernas incluye la depilación ya sea a través del rasurado o de la depilación con cera seguida de una exfoliación granular, aplicación de cremas hidratantes y masajes. Daniela Perera tiene 34 años y se dedica con pasión a la salud de los pies. Su objetivo es atender, tratar y prevenir las patologías relacionadas con los pies, contribuyendo a una mejor calidad de vida para sus pacientes. En esta entrevista con CAMBIO, la Pedicura nos relata los tratamientos y cuidados que debemos tener con nuestros pies.
-¿Qué le motivó a dedicarse a esta profesión?
-Desde que empecé a estudiar pedicura, me di cuenta de que los pies son mucho más que una cuestión estética. Son una estructura compleja formada por músculos, tendones y huesos que sostienen nuestro cuerpo y cumplen funciones esenciales como el apoyo, el equilibrio y la marcha. Este esfuerzo constante y el peso que soportan los hace propensos a distintas afecciones. Mi motivación es poder mejorar la calidad de vida de las personas atendiendo la salud de sus pies de manera integral. Con conocimiento y experiencia, realizo un trabajo podológico profundo, atendiendo patologías cuando es necesario.
-¿Quién necesita atención podológica?
-Desde niños hasta ancianos, todos pueden beneficiarse de un cuidado podológico, especialmente en el contexto de afecciones específicas o para mantener una buena salud de los pies. Por ejemplo, durante el “Mes Mundial de la Diabetes”, recordamos la importancia del cuidado de los pies en pacientes diabéticos, ya que un tratamiento adecuado puede prevenir lesiones y complicaciones graves. Además de atender patologías, enseño a los pacientes prácticas básicas, como el correcto corte de uñas para evitar problemas como uñas encarnadas. También realizo limpiezas profundas en los canales ungueales y retiro de hiperqueratosis (engrosamiento de la capa externa de la piel), siempre respetando los puntos de apoyo y trabajando con cuidado para eliminar callosidades de forma segura.
-¿Cuál es el enfoque al
tratar los pies de una
persona diabética?
Siempre digo que “menos es más”. Los procedimientos deben ser suaves y realizados con precaución para evitar cualquier tipo de lesión. La prioridad es la prevención y el mantenimiento, más que las intervenciones agresivas.
-¿Qué mensaje les daría a las personas con diabetes sobre el cuidado de sus pies?
El cuidado de los pies debe ser parte de su rutina diaria. Unos pies sanos no solo mejoran la calidad de vida, sino que también previenen problemas que podrían complicarse gravemente. Inspeccionar, hidratar, secar bien y usar calzado adecuado son pequeños pasos que marcan una gran diferencia. Y, por supuesto, no duden en buscar ayuda profesional cuando lo necesiten. Que cuidar nuestros pies no es un lujo, es una necesidad. Ellos sostienen nuestro cuerpo y merecen atención y cuidado. No esperen a tener dolor o una lesión para buscar ayuda. Una atención podológica regular mejora no solo la salud de los pies, sino también la calidad de vida en general.
