miércoles 5 de febrero, 2025
  • 8 am

“El fútbol nació y seguirá siendo de los barrios”

Un hombre nacido en un barrio populoso de Salto, como Ceibal, que hizo toda su carrera en el fútbol en Ferro Carril, donde ganó todo como jugador e integrante del cuerpo técnico junto a Ramón Rivas. Nos cuenta su historia en el fútbol, del bi-campeonato del 68′ ante Nacional, Italo Ramón Arrigoni Dotta, en diálogo con CAMBIO.
«-Nací en el barrio Ceibal en el año 49, un domingo a la una de la tarde, en calle Yacuy y Michelini, que después fue la casa de Galimberti y hoy en día hay un comercio. Como anécdota mi padre (Italo Garibaldi) fue un día a ver a Ceibal que jugaba una final que gana 4 a 2 y luego él vivió la fundación de Ceibal en 1934. Para que vea nací en una familia fútbolera, mi padre fanático de Ceibal, mi madre (Violeta Dotta) también hincha de Ceibal. En frente de mi casa era todo campo, por eso cuando tuve uso de razon, que recuerdo, mis padres me regalaron una pelota de plástico y alcancé de muy niño a jugar allí, también con pelotas de goma, una infancia muy linda. Por eso siempre digo que el fútbol nació y sigue siendo de los barrios, de donde antes los clubes se nutrían de jugadores del campito; de ahí salieron los grandes jugadores del fútbol salteño».
«Después que mis padres se mudaron a vivir en la entrada de Ceibal, Beltrán 801 y Solano López, ahí empecé a jugar a la pelota, en la plaza, pero con una pelotita de goma chiquita, recuerdo hacer gambetas entre los árboles, aprovechábamos ese espacio físico, pero haciendo driblings con los árboles, así aprendimos a jugar al fútbol. Cuando tenía 13 años un verano nos invitaron a mí y otros gurises del barrio, para jugar campeonatos en la cancha de baby fútbol de Ferro, que era donde está el gimnasio hoy, era un espacio grande incluso era una cancha con arcos grandes, llegaba hasta donde están las piscinas hoy. Una alegría para nosotros poder jugar con una pleota de cuero oficial por primera vez en la vida. Ahí fue donde el técnico de inferiores de Ferro, la “Mona” Volpi, empezó a mirar a todos los gurises que fuimos de Ceibal, éramos 7 o 8 gurises que fuimos de Ceibal a Ferro Carril. Al final quedé solo yo, porque los otros que jugaban muy bien se vinieron para Ceibal. Un ejemplo es Omar Olaizola; ¡no saben lo que jugaba de puntero derecho! Querían que jugara en Ferro y se vino para Ceibal, también estaba mi hermano Daniel, con el “Pato” Morales, Frediani, y otros gurises que jugaban muy bien y se vinieron para jugar en la cuarta de Ceibal».
LOS PRIMEROS PASOS Y PRIMEROS TÍTULOS
«En mis comienzos empecé jugando de zaguero, siempre me gustó jugar atrás, pero cuando tenía 16 años, que debuto en primera, me fueron a buscar porque se había lesionado no recuerdo quién y me pusieron de lateral izquierdo. Fue ante River en el Estadio Dickinson. La misión mía era cuidar al “Tono” Maidana, uno de los mejores punteros, que ya estaba con unos cuantos años y nos hizo tres goles. Terminamos perdiendo 4 a 3, un cuadrazo River. En el 68′ el “Chancha” Frediani jugaba de “6” en Ferro, mirá como es la historia; en el Preparación me había puesto de “3”, anduve bien jugando con el “Chueco” Burgos, y cuando empezó el Salteño me pusieron de “6” y al “Chancha” Frediani lo pusieron de 10; él jugaba en cualquier puesto.
Ferro venía de salir campeón en el 67′, en el 68′ logramos el bi-campeonato Salteño de forma extraordinaria por cómo se fueron dando las cosas. Nacional hizo un gran campeonato, si bien el mismo fue parejo, ellos tenían un cuadrazo, hay quienes dicen que era el mejor plantel de la historia de Nacional, ¡lo que jugaba al fútbol! Empezando la segunda rueda en la cancha de ellos nos hizo 5 goles, nos ganaron 5 a 1 y nos tomaron el pelo, íbamos juntos y ahí nos sacan ventaja y como venían jugando eran campeones de forma adelantada. Nosotros nos fuimos recuperando, ellos perdieron con Saladero, y llegamos cabeza a cabeza, ellos goleando. Por eso siempre digo que algo serví en el fútbol, porque en la final tuve que marcar a grandes jugadores para ganar y salir campeones, una delantera que era un espectáculo, la delantera era Vallejos, De Vargas, el “Nene” Castro que era de Bella Unión, el “Pacho” Jardim. En la final, en los 90′ reglamentarios que emptamos 0 a 0 el “Pacho” Jardim sacó un tiro a falta de 5′ pega en el palo y la raya y sale para afuera, y en la hora De Vargas, lo que era un gol increíble en la raya, tira la pelota para afuera. Nosotros jugábamos bien pero Nacional tenía un equipazo, eso es el fútbol, con Núñez de “5” el “Coco” Minelli, uno de los mejores cuadros que me tocó enfrentar en mi vida. Después cosas del fútbol, en el alargue de 30′ terminamos ganando nosotros 3 a 1, hicimos 2 goles en los 15′ iniciales, después ellos descontaron 1-2 y nosotros hicimos el tercero, para lograr el campeonato. Wilson Suárez hizo el primero, dos hizo Juan Izaguirre, el de ellos de penal lo hizo Dalmao. Olvidé decir que los 90′ jugamos con un calor de 40 grados, después vino una tormenta con lluvia, y así jugamos el alargue. De entrada Wilson Suárez hizo un gol a lo “Artime”, a los pocos minutos Juancito Izaguirre hizo el segundo y ahí cambiamos la historia. Siempre lo hablamos con el “Chueco” Burgos que está en Montevideo y nos emocionamos y lloramos un poco, por lo sucedido ese día. Siempre hablamos de esos dos primeros goles cambiaron la historia».


«Se nos fue muy
temprano Ramón…»

«En mis inicios jugaba en cuarta, tercera y reserva, alcanzando a jugar en primera también. En inferiores jugábamos en la cancha de Santa Rosa, donde hoy es El Revoltijo, ahí éramos locales, conocíamos todos los pozos que tenía la cancha. Ahí conocí a un gran amigo, Ramón Rivas, que en inferiores jugaba de puntero, vivía en frente a la cancha de Santa Rosa. Quiso la vida que siempre estuviera a mi lado, en las fotos siempre estamos juntos de todos los Ferro campeón y también cuando fue técnico, cinco títulos salteños, después de 18 años Ferro sin salir campeón, y lo máximo, los dos títulos del interior, que hicieron conocer a Ferro como grande del interior. Yo siempre al lado de él en las fotos. Jugamos en una cuarta que estuvimos dos años invictos, hasta que perdimos un partido con Hindú 0-1. Se nos fue muy temprano Ramón. Con Ferro fue un ciclo exitoso, en Universitario también, ganó cuatro títulos salteños, jugó copas de OFI, estuvo cerca de salir campeón en la Copa de Clubes cuesta un poco más como pasó con Ferro, si hubiera ido a otro club hubiera hecho lo mismo. Así como fue como jugador, como técnico marcó su historia en nuestro fútbol, solo faltó volver para terminar en Ferro, ese era su pensamiento. Antes de dejarnos había tenido una linda charla de amigo confidente conmigo».


«Antes era marcar, no
se cruzaba el medio»

«Hice toda mi carrera como lateral izquierdo. Antes era marcar, no se cruzaba el medio de la cancha. Clive Pérez fue uno de los que me dijo, ‘cuando yo agarre la pelota vos picá’ y así empecé a subir por el lateral. El técnico que era el “Morocho” Bentancourt, me decía ‘cuando llegués levantá el centro’, que era lo que hacía. El tema era cuando podía.
«Tuve que marcar a grandes punteros, el mejor era Vallejos de Nacional, el “Chirlo” Gómez, Cáceres de Hindú, el “Pimpo” Coumas de Dublín, Juan Mora de Salto Nuevo, Manuel Alvez de River. Salían partidos hermosos, porque yo les agarraba la marca, no quiere decir que ellos no me pasaban, y hacían goles en esos grandes duelos».


Las finales con Gladiador, River y Julio con 15 años

«Empecé a jugar en la década del 60′ en Ferro, campeón 67′, 68′, 72′, 77′ y 79′. En los 80′ dejé de jugar para dirigir Ferro, a pedido de patrón de Molinos Santa Fé, el “Chato” González, para dirigir 86′ y 87′ con gurises. No anduvimos mal, entramos a la liguilla, y en el 88′ dirige Enrique Bruno y sale campeón con todos esos jugadores formados conmigo. Después al lado de Ramón desde 2002 a 2012, otra etapa importante de mi vida junto a Ferro Carril, una gran institución que llevo en el corazón».
«En 1972 Gladiador con un gran equipo, con los hemanos Bermúdez, jugamos la final en el Dickinson y ganamos 2 a 0. En el 77′ las recordadas tres finales históricas con River, en una década muy especial para ellos, que estuvieron en varias definiciones y ganaron tres campeonatos. Hicimos una buena primera rueda, le sacamos cinco puntos, después descontaron y nos pasaron. Sufrimos muchas lesiones, yo me termino quebrando. Termnamos iguales al cabo de dos ruedas. Lo que fue Ferro con relación al 68′, con bajas llegamos a las finales, yo estaba quebrado y mi hermano Julio tenía 15 años, andaba bien en 4ª y el DT Hugo De Souza me dice ‘decile a tu hermano si se anima, que venga que creo juega el domingo’. Faltaba uno para completar y él jugó las finales. Los medios de prensa decían ‘un caso único’ tres finales un gurí de 15 años».

Sol