El entrenador de Salto Fútbol Club, Joaquín Burutarán, pese a no haber logrado la aspiración mayor, fue entusiasta con los resultados obtenidos durante 2021 y analizó lo logrado durante la temporada. Consultado sobre el balance que hace luego de culminada la temporada, afirmó:
“Si bien después de recientes derrotas es difícil analizar, el balance de la temporada es más que positivo, con jugadores que nunca habían jugado en esta divisional, con un equipo que se armó desde cero. Estamos más que contentos, si bien las aspiraciones eran mayores, a lo que llegamos, estamos muy conformes”.
En cuanto a lo que respecta al nivel de una competencia de AUF, dejó en clara las diferencias con el fútbol salteño o del interior: “La dinámica, la jerarquía de los jugadores. Un error es un gol en contra. Eso lo pecamos, tuvimos errores que por ahí en OFI no son tan graves y acá lo pagás con los tres puntos”.
También se le preguntó sobre si las expectativas de conseguir el ascenso ya en esta primera temporada eran altas: “En principio sí. Después de que se fueron dando los partidos la vimos cerca. Con errores que tuvimos luego quedamos lejos pero estuvimos a la altura en su momento.”
Como última cuestión, las fortalezas y debilidades: “La fortaleza es el grupo humano que se formó. Hoy se dejó todo en la cancha (en referencia a la última fecha el pasado jueves contra La Luz) pese a que no teníamos mucho por lo que pelear: se vio una garra y un corazón bárbaros. La debilidad es que somos un equipo nuevo, la gente aún no se ha agolpado para seguirnos y aún no somos los locales que podríamos llegar a ser”.
Mientras se siguen recibiendo interesados al llamado a aspirantes para comenzar a entrenar con miras a sumar al club a las formativas (obligatorias) que el club deberá tener el año próximo, Burutarán y el resto del cuerpo técnico también planifican lo que será la segunda participación en la categoría.