martes 26 de noviembre, 2024
  • 8 am

Con la izquierda, ¡No te comas la pastilla!

Gustavo Varela
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Gustavo Varela

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Por Gustavo Varela
La justicia tarda pero llega, reza un refrán, que no por conocido, tenemos que dejar de recordarlo. Y esto viene a cuenta, de la estrategia que ha seguido el FA-PIT durante estos años, con relación al gobierno de la coalición republicana.
Desde un primer momento, y peor aún, desde antes de que asumiera el gobierno, la fuerza política de izquierda, comandada por los ultras del MPP y del Partido Comunista, han intentando, mediante la estrategia del miedo y la sospecha, dominar la agenda informativa, para mantenerse en el centro de la escena política.
Recordemos lo que fue la campaña en contra de la LUC que llevó a cabo la izquierda nacional, plantando en cada una de las iniciativas el miedo, sospechas y dudas, que con posterioridad a la confirmación de la ley que le dio la ciudadanía, nada ocurrió.
Podemos recordar lo que se hablaba del “desalojo express”, que iba a dejar sin viviendas a personas, por la voracidad de los propietarios, que sin miramientos apenas alguien se atrasara lo sacarían a la calle. Se confirmó la LUC y nada de aquellas barbaridades ocurrieron. Esas pavadas las repetían dirigentes del FA como el Intendente de Salto.
Pero también con respecto a la LUC, ya no hablemos de dirigentes que hablaban por decir algo, como el caso del esporádico Intendente, sino en éste caso la “Academia Nacional”, la Universidad de la República, repetía una y otra vez, enormes disparates, obviamente intentando llevar agua para el molino frenteamplista.
Veamos un ejemplo, con referencia a normas referidas a seguridad de la LUC.
Udelar entiende que son «preocupantes» los artículos referidos a seguridad ciudadana, «en tanto son en general regresivos en materia de derechos humanos y contravienen la legislación nacional vigente, la normativa internacional y sus orientaciones doctrinarias, así como las recomendaciones de investigadores y académicos en la materia». Más adelante, el documento señala que las normas que modifican la Ley de Procedimiento Policial y el Código de Proceso Penal «presentan riesgos para las libertades republicanas al ampliar las facultades de la Policía y relajar los controles a los que debe someterse, así como al habilitar a policías y militares retirados a portar armas y permitir a estos últimos intervenir en tareas policiales».
Udelar considera «especialmente preocupante» que el control de identidad que pueden realizar la Policía pueda efectuarse en cualquier caso: «Si la persona no cuenta con documento de identidad, la Policía estará facultada a conducirla a sus dependencia”.
Se confirmó la LUC por parte de una mayoría popular y nada de aquellas barbaridades doctrinarias, que la “Academia” copada por los ultras alertaba, ocurrieron.
Lo mismo con la denuncia que los Senadores Charles Carrera y Mario Bergara denunciaron en la justicia sobre el caso de la concesión de la terminal de contenedores del puerto a la empresa Katoen Natie, que no les alcanzó con denunciarlo una vez, denuncia que fue archivada, sino que la segunda denuncia ampliada presentada a la justicia, la Fiscalía la vuelve a archivar pues no encontró ninguna irregularidad.
El enchastre, por el enchastre mismo
Ni hablar de la “Libertad responsable” que se aseguró por parte del gobierno en la pandemia, donde los diferentes agentes políticos encubiertos de la izquierda, hablaban en contra, aconsejándonos seguir los pasos implantado por el Presidente Argentino de restricción total, de la ciudadanía, mientras él, hacía lindas y hermosas fiestitas.
Podríamos citar la reforma de la seguridad social, a la que le van a dar matraca en contra durante toda la campaña electoral, metiendo el miedo y cubriendo con sospechas, lo que es la real intención, de quedarse con los ahorros de los trabajadores, para tener plata fresca si son gobierno.
Ya lo hicieron en la Argentina, y así están los jubilados.
O sea y para ir terminando.
De aquí a las elecciones vamos a escuchar un sinfín de disparates y barbaridades, orientados a infundir el miedo entre la población, con el único objetivo de no tener que explicarle a la gente, por parte de la fuerza política de izquierda, apoyada por el Pit-Cnt, cuáles son sus planes de gobierno, si es que los tienen, o cuáles son sus alternativas, a las modificaciones que proponen a las reformas realizadas.
Típico de esa ola progresista, que está en retirada en toda América Latina.