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Por Cary de los Santos Guibert.
Corría la década de los años 80 del Siglo XIX y algunas de las firmas comerciales y comercios que existían en la progresista ciudad de Salto, eran los siguientes: Guimaraens & Echeverry; Portillo Novoa & Cia.; París & Londres: Manuel & González; José Ponds & Palet; Fernández Hnos. & Cía.: Francisco Latapié Hnos.; Trabucatti & Cía.; Juan Mazza & Cía.; Florenzano Hnos.; Fonticiella & Moreno: Gonzalez & Soto; Giambiaggi & Cía.; Juan Avellanal & Cía.: A. Castellano é Hijos; Portillo Novoa & Cía.; Avellanal & Cía.; Nin & Goyea; Juan Mazza & Cía.; Macías Hnos.; Mendel & Hnos.; Confitería Suiza; Chiazzaro é Hijos; Carbonería Central; Orcasitas & Lazabal; Almacén del Ferrocarril; Blanco & Cía; P. Solari e hijos; Siemens Hnos.; Lizarralde & Avellanal; Arechavaletta & Real; Scanavino Hnos.; Bonetti & Simonelli; Domingo Zabala (Gran Hotel Concordia); Almacén 18 de Julio, Juan Mazza & Cia.; Velasco & Cía.; López & Pujol.
VIEJOS CONOCIDOS
En esa época los vecinos del Salto, casi todos se conocían y algunos de ellos, eran: don Agustín conocido como «El capataz»; Gómez conocido como «El empresario»; don Alejandro Manfredi «El barbero», don Lorenzo Pons «El tambero»; don Camilo Zerboni «El pintor»; Leopoldo «El carpintero»; Don Sachi «El pintor»; don Alejandro, «El herrero»; don Leopoldo «El carpintero»; don Manuel «El tornero»; don Carlos Santini, arreglaba caños y colocaba sanitaria; Don Juan Cataluña, hacía trabajos de latonero; don Andrés Sanguinetti «El viandero»; don Carlos «El verdulero»; don Trifón Herrera hacía trabajos de pintura y doña Guichan era «La modista».
-Recibo y fachada de la Ferretería y Hojalateria de Tranquilino Falcioni, luego Falcioni y Solari, finalmente Ferretería Solaro.