
Por Andrés Torterola
El domingo 2 de marzo, el suicidio de un policía volvió a encender las alarmas. En lo que va del 2025, ya son tres los efectivos policiales que se han quitado la vida en el país. Uno de ellos era un agente de Salto, quien se suicidó en enero. Para abordar esta problemática, CAMBIO entrevistó a Patricia Noy, presidenta del Sindicato Policial (Sifpom), quien señaló que el suicidio en las fuerzas policiales es un fenómeno en aumento y de origen multifactorial. Destacó su profundo impacto en los ámbitos laboral, individual, familiar y social.
JÓVENES Y VULNERABLES
El Ministerio del Interior, en un informe de abril de 2024, reconoce que se trata de un problema de “difícil abordaje”. Subraya la necesidad de “identificar factores y conductas de riesgo”, promover una “captación precoz” y fortalecer las estrategias de prevención. La mayoría de los suicidios en la policía ocurre entre los 18 y 35 años. En muchos casos, los efectivos utilizan su arma de reglamento. Si bien los problemas familiares pueden influir, es clave analizar el contexto laboral. Los policías enfrentan altos niveles de estrés, violencia y situaciones traumáticas que involucran incluso a sus propios compañeros.
PRESIÓN
La presión que reciben, tanto de la sociedad como de la delincuencia, es significativa. Un caso reciente ocurrió en Bella Italia, Montevideo, donde un patrullero fue apedreado mientras intentaban detener a un sospechoso. La violencia contra ellos se ha normalizado, aumentando su carga emocional. Detrás del uniforme hay padres, madres, hijos y hermanos, que arriesgan su vida diariamente.
CONDICIONES LABORALES EN SALTO
Esta carga emocional, sumada a jornadas extenuantes y condiciones salariales inadecuadas, agrava el desgaste psicológico de los efectivos. A esto se suma el atraso en los pagos, generando inestabilidad financiera y endeudamiento. En 2024, en la zona rural de Salto, los policías debieron duplicar su carga horaria sin pago adicional. Otro caso fue la imposición del servicio por el artículo 222 durante el carnaval de Artigas, cuando muchos funcionarios ya habían cumplido su horario. Sin descanso adecuado, varios aceptaron por temor a represalias futuras.
ÁMBITO POLICIAL
“El ámbito policial, de estructura jerárquica rígida, también presenta casos de acoso laboral, problema que, afecta significativamente la salud mental de nuestros compañeros, siendo un factor determinante. La rigidez jerárquica, La falta de mecanismos efectivos de denuncia y protección hace que muchos enfrenten situaciones de hostigamiento sin encontrar una salida adecuada. Es fundamental implementar medidas urgentes que aborden la salud mental de los efectivos, mejorar sus condiciones laborales y establecer mecanismos de apoyo psicológico. El problema no solo afecta a la policía, sino a toda la sociedad que depende de su labor”, concluyó Noy.