jueves 14 de noviembre, 2024
  • 8 am

Capo del narcomenudeo salteño operaba desde su finca en el barrio Río Uruguay de Paysandú

Minervine

Un importante operativo liderado por la Jefatura de Policía de Salto, que lleva una veintena de formalizados por delitos vinculados a la venta de estupefacientes, completó su objetivo al acertar un golpe en Paysandú donde operaba uno de los principales de la red: Jorge Federico González Silva, conocido como “El Araña”, informó El Telégrafo. El hombre, oriundo de Salto, se había radicado en Paysandú en las inmediaciones de Éxodo y Joaquín Suárez. Desde allí se dedicaba a la venta de marihuana y cocaína, pero comandada su “negocio” en Salto donde mantenía una rivalidad con otra banda que los llevó, en el último tiempo, a protagonizar varios enfrentamientos armados. La violencia con que estos bandas se disputaban la venta de drogas fue lo que llevó a la Policía a comenzar una investigación.
POR UN COPAMIENTO
Tal como lo informamos ayer, a mediados de marzo, en el barrio don Atilio de Salto, se había suscitado un copamiento. Si bien la policía contó –en primera instancia— con poca información, todo parecía indicar que se trataba de un hecho planificado ya que el atraco fue a una persona conocida en el mundo delictivo. A raíz de ese hecho, las bandas lideradas por Pablo Silveira y por “El Araña” González comenzaron a enfrentarse; aunque todo se mantenía en reserva entre los integrantes de cada una; maniobra que no era nueva ya que en 2018 incendiaron una casa.
“EL ARAÑA” EN PAYSANDÚ
Teniendo a parte de una de las bandas encarceladas, restaba ir por el cabecilla de la otra. Contado con varios datos, la policía salteña rastreó un arma a la zona de Guaviyú, pero finalmente el operativo fue derivada al departamento de Colonia donde detuvieron a otros integrantes de la banda. Pero restaba la captura de “El Araña” González.
“Llegamos a “El Araña” que era el artífice del copamiento (a la banda de Silveira) sabiendo que estaba radicado en Paysandú. Había estado preso en la cárcel de Salto y cuando obtuvo la libertad se radicó en Paysandú, a donde después se llevó a otros salteños que trabajaban con él”, contó la Policía. González Silva, de 39 años, que habitaba una finca en Éxodo y Joaquín Suárez, cuenta con un vasto historial delictivo.