jueves 21 de noviembre, 2024
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Ejercicios de Kegel: El camino hacia una mayor satisfacción sexual

Myriam Puiggrós
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Myriam Puiggrós

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Minervine

Por Myriam Puiggrós. Psicóloga Sexóloga
Comenzaremos hablando del piso pélvico o periné. Es un conjunto de músculos, tejidos conectivos y ligamentos que se encuentran en la parte inferior de la pelvis. Estos músculos se hallan entre las piernas y se extiende desde el pubis por delante, hasta el coxis por detrás. El periné contiene los genitales externos y el ano y hace de sostén a los órganos internos como ser vejiga, útero y recto en la mujer, y vejiga y recto en el varón. Son unos músculos que se encargan de la continencia (urinaria, heces y gases) y permiten la micción, la defecación, el coito y el parto. Podemos ver que a pesar de su importancia, la ejercitación de esta musculatura que constituye el periné no se ha tenido demasiado en cuenta. Uno de los métodos menos conocidos pero efectivos para mejor las sensaciones genitales son los ejercicios de Kegel. Fueron nombrados así por el ginecólogo Arnold Kegel quien los implementó para la continencia de orina en el pos parto. Los ejercicios de Kegel consisten en la contracción y relajación repetida de estos músculos para fortalecerlos con el tiempo. Los beneficios para las mujeres serían: mejorar el control sobre los músculos vaginales, lo que puede traducirse en una mayor sensación durante las relaciones sexuales con penetración y mejorar la capacidad orgásmica. Prevenir el prolapso ya que sostienen los órganos pélvicos internos y la continencia de orina. A los hombres les ayudaría a mejorar la circulación sanguínea en la zona pélvica y fortalecer los músculos responsables de mantener una erección, lo que puede contribuir con ella haciéndola más firme. Pueden colaborar a ganar un mejor control sobre la respuesta sexual, permitiendo un mayor tiempo antes de la eyaculación. Independientemente del género, el fortalecimiento del suelo pélvico a través de los ejercicios de Kegel puede aumentar la confianza en la intimidad sexual. Saber que uno tiene un mejor control sobre su respuesta sexual puede reducir la ansiedad y mejorar la satisfacción. Para realizar los ejercicios lo primero es identificar los músculos correctos del suelo pélvico. Podés hacerlo intentando detener el flujo de orina mientras estás en el baño. Los músculos que utilizas para hacer esto (cortar el chorro de orina) son los que debes enfocar en tus ejercicios de Kegel. Una vez identificados, consisten en una serie de contracciones y relajaciones específicas de los músculos del suelo pélvico. Contrae estos músculos durante 5 segundos y luego relájalos durante otros 5 segundos. Repite esto de 10 a 15 veces, al menos tres veces al día. A medida que avances vas aumentando el número de repeticiones. La clave para obtener resultados es la persistencia. Como con cualquier ejercicio, llevará tiempo ver mejoras significativas. Se recomienda hacer estos ejercicios de forma regular durante al menos varias semanas. Se puede intercalar series de contracciones de 5 segundos contracción y 5 segundos de relajación o contracciones continuadas a modo de pulsaciones (contraer, relajar de manera continua). La mujer puede cotejar el estado de su musculatura perineal, además de cortando el chorro de la orina, introduciendo un dedo en la vagina y presionando con esta sobre él. Debe sentir dicha presión. Siempre es aconsejable hablar con un profesional de la salud antes de comenzar cualquier nuevo régimen de ejercicios si se tiene preocupaciones médicas específicas Es fundamental recordar que la satisfacción sexual es multifacética y depende de muchos factores, incluida la comunicación con la pareja. }Esto no quita que mantener estos músculos en buena forma pueda tener un impacto significativo en la salud y la satisfacción sexual. Los ejercicios de Kegel son una herramienta valiosa para mejorar la salud y la satisfacción sexual, además de ofrecer una serie de beneficios para la salud en general. Ya sea que busques fortalecer el control de la vejiga, mejorar la función sexual o prevenir problemas de salud a largo plazo, estos ejercicios pueden ser una adición efectiva a tu rutina diaria. No subestimes el impacto que unos músculos del suelo pélvico fuertes pueden tener en tu calidad de vida y tu satisfacción en la intimidad.