Dra. María Jesús Puche
Consejera CMU Regional Norte
La OMS establece que existe diarrea cuando hay tres o más deposiciones en 24 horas. Los casos de diarrea suelen aumentar en la temporada de verano por varios motivos.
Los cambios de temperatura incrementan la aparición de virus, bacterias y parásitos en el ambiente, lo que puede causar diversas infecciones gastrointestinales que conllevan diarrea.
El calor acelera la descomposición de los alimentos que están a temperatura ambiente y de hecho, las infecciones que desencadenan las diarreas pueden deberse al hecho de comer alimentos en mal estado. También hay que tener en cuenta que con las temperaturas elevadas hay más moscas, mosquitos y otros insectos que inoculan gérmenes en los alimentos en que se posan.
La precaución fundamental es mantener los alimentos cubiertos y en la heladera hasta el momento de cocinarlos. Cuidando de que no se rompa la cadena de frío en los alimentos que lo requieran.
Los tres tipos de infecciones que causan la diarrea de verano son:
• Infecciones víricas, como el rotavirus
• Infecciones bacterianas, como Salmonella, Escherichia Coli, Campylobacter y Shigella.
• Infecciones parasitarias, los parásitos pueden entrar al tracto digestivo a través de los alimentos o el agua. Los que causan diarrea son Criptosporidio, Entamoeba histolytica y Giardia lamblia.
La contaminación de los alimentos se puede producir durante su procesamiento, transporte o preparación.
Además, las altas temperaturas también pueden provocar que las bacterias dañinas de nuestro intestino se expandan. Esto puede desencadenar o empeorar síntomas como la diarrea por golpe de calor y la hinchazón.
Tratamiento contra la diarrea
1- Hidratación
El principal riesgo de la diarrea es la deshidratación, que puede reconocerse por los siguientes signos: sequedad de piel y mucosas (boca seca, ojos hundidos), intranquilidad e irritabilidad, diuresis escasa y orina concentrada (muy oscura). Por ello, la hidratación es muy importante cuando se tiene diarrea y se recomienda beber mucha agua con frecuencia a lo largo del día.
En la farmacia, también se dispone de numerosos preparados comerciales de solución de rehidratación oral (SRO). Se desaconseja utilizar preparaciones caseras, así como bebidas energéticas, zumos o refrescos, ya que su contenido en azúcares es excesivo y su osmolaridad no es la adecuada.
2- Alimentos que debes evitar si tienes diarrea
En las primeras 24-48 horas tras el inicio de la diarrea, la dieta debe ser líquida y deben evitarse alimentos grasos, leche, frituras, alimentos ricos en fibra (verduras, frutas, legumbres) y bebidas estimulantes o con gas.
3- Probióticos
Los probióticos son fuentes de bacterias «buenas» que actúan en el tracto intestinal para crear un entorno intestinal saludable. Ayudan a restaurar de forma natural y rápida, la función normal del intestino
Son esencialmente microorganismos vivos presentes en ciertos alimentos.
El consumo de alimentos probióticos puede ayudar a equilibrar la microbiota.
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