Pasar al contenido principal
Jueves 27 de Noviembre, 2025 49 vistas

Primaria intervino con equipos de psicólogos en escuela donde niños ingresaron con elementos cortantes

Por Andrés Torterola
La Inspectora Departamental de Primaria, Alejandra Leal, confirmó a CAMBIO que se detectó la presencia de armas blancas en las mochilas de dos niños de la escuela de barrio La Amarilla. Explicó que se trata de un centro educativo en el que ya se venía trabajando con los equipos técnicos —psicólogos y asistentes sociales— debido a la aparición de determinadas conductas que requieren acompañamiento especializado. Leal detalló que los elementos cortantes nunca fueron utilizados ni exhibidos por los menores, ni hubo amenazas hacia otros compañeros. La situación se hizo visible cuando algunos escolares se enteraron de la presencia de estos elementos cortantes y comenzaron a comentarlo entre sí, hasta que finalmente la información llegó a la maestra del grupo.
ABORDAJE CONJUNTO 
A partir de ese momento, el equipo de inspección, la dirección de la escuela y el equipo técnico actuaron de inmediato, siguiendo los protocolos de intervención para garantizar la protección de los niños involucrados y del resto del alumnado. Se contactó de forma urgente a los adultos responsables de los menores para informar lo sucedido y comenzar un abordaje conjunto. Además, fue convocada la Policía Comunitaria, que intervino como parte del procedimiento preventivo y de orientación. La inspectora señaló que actualmente se continúa trabajando en diálogo estrecho con las familias, reforzando acciones vinculadas a la convivencia, la contención emocional y la protección de los derechos de los niños. También afirmó que ambos menores siguen asistiendo con normalidad a la institución, bajo seguimiento permanente. “No hubo amenazas, ni niños lastimados. Lo que sí había en las mochilas eran objetos que no deberían estar allí”, confirmó Leal, insistiendo en que se trata de una intervención preventiva y de acompañamiento, con el objetivo de evitar que estas situaciones puedan escalar o derivar en escenarios de riesgo.
EXISTE TRANQUILIDAD 
Cuando se encuentra un elemento cortante en la mochila de un niño, es evidente que deben intervenir de inmediato tanto la escuela como la familia. Detrás de estas situaciones siempre hay motivos que deben analizarse, ya que los niños, desde su lógica y su mundo emocional, pueden tomar decisiones que no son adecuadas. En algunos casos, pueden llegar a pensar que portar estos objetos les brinda algún tipo de seguridad, sin dimensionar los riesgos que esto implica.
ABORDAJE DE VIOLENCIA
En el centro educativo se viene trabajando precisamente sobre situaciones de violencia que involucran tanto a niños como a adultos. Pese a la complejidad del contexto, existe tranquilidad porque la institución cuenta con equipos técnicos preparados para abordar este tipo de problemáticas, tanto en el transcurso del año como en circunstancias particulares como la que se presenta ahora. Durante la jornada de ayer, las familias y los niños participaron en la escuela de una instancia de trabajo junto a la psicóloga, el equipo de asistentes sociales de Primaria, la directora del centro y los inspectores. El objetivo fue analizar lo ocurrido, brindar contención y continuar avanzando en estrategias que fortalezcan la convivencia y la protección de los menores.