Próximo a las 4 de la mañana de ayer la Policía concurrió a calle Catalán a la altura del 1000 por el hurto de una moto. En el lugar se entrevistó a la víctima -un hombre de 48 años de edad- quien manifestó que dejó su moto marca Yumbo estacionada dentro de su predio con el portón cerrado y próximo a la hora mencionada escuchó ladrar a su perro, percatándose de la falta del birrodado. Posteriormente, mientras personal policial circulaba por calles Misiones y Yacuy, divisaron a un sujeto en una moto, quien al percatarse de la presencia policial se dio a la fuga.
PERSECUCIÓN
Se le dio seguimiento, logrando detener al conductor -un joven de 20 años de edad- el cual expresó que la moto le había sido prestada. Verificado el birrodado en el Sistema de Gestión y Seguridad Pública, figuraba como robada coincidiendo con las descripciones aportadas por la víctima. Se efectuaron los trámites correspondientes.
CONDENA
Culminadas las actuaciones en el Juzgado Letrado de Primera Instancia en lo Penal y de Adolescentes de Segundo Turno de Salto, condenó a D.Y.G.M., como autor penalmente responsable de la comisión de un delito de receptación en régimen de reiteración real con un delito de hurto especialmente agravado y un delito de violación de domicilio en concurrencia fuera de la reiteración con un delito de hurto, la pena de 13 meses de prisión.
CONDENADO POR DESACATO
Por otro lado en el Juzgado Letrado Especializado en Violencia basada en Género, Violencia Doméstica y Sexual de Salto de primer Turno se dictó sentencia: a J.A.S.E como autor penalmente responsable de un delito de desacato a la pena de 3 meses de prisión, con descuento de la detención sufrida. Se le concedió el beneficio de libertad a prueba, consistiendo sus obligaciones en:
-Residencia en un domicilio fijo.
-Sujeción a la orientación y vigilancia permanente
- Presentación en la seccional policial de su domicilio una vez por semana sin permanencia, prestación de servicios comunitarios por dos horas diarias por semana
- Prohibición de salir del país sin la autorización suficiente durante el término de la condena.

