Plebiscito de allanamientos nocturnos

Por Gustavo Varela
Junto a las próximas elecciones nacionales, los uruguayos, estamos llamados a expresar nuestra opinión sobre dos temas que nos resulta por demás importante, por las consecuencias a futuro que puedan tener, según el resultado sea uno u otro.
Los plebiscitos por el cual vamos a emitir nuestra voluntad, versan sobre los allanamientos nocturnos, y el otro es sobre la derogación de la reforma de la seguridad social aprobada en el presente período.
Hoy nos vamos a referir sobre el primero de ellos.
Nuestra Constitución Nacional, en el artículo 11 indica que el “hogar es un sagrado inviolable” y que “de noche nadie podrá entrar en él sin consentimiento de su jefe, y de día, solo con orden expresa de juez competente, por escrito y en los casos determinados por la ley”.
Una vieja norma, que fue garantía en otros tiempos, que a las sombras de la noche, nadie podía si el dueño no quería, ingresar al mismo.
Pero hete aquí, que esa garantía que el orden jurídico estableció en el pasado, es la ventaja que el narcotráfico utiliza en la noche, para poder llevar a cabo sus tropelías tranquilamente, sin que las fuerzas del orden público puedan proceder, y en caso de que se ponga feo el ambiente, les basta con proceder a desprenderse de la misma, haciendo uso del sistema de saneamiento, sin dejar rastro alguno.
Una norma, que era garantía contra el poder político usado abusivamente, se transformó en un escudo impenetrable, que el narco, lo utiliza para llevar a cabo sus negocios con riesgo cero.
El Poder Ejecutivo, con el apoyo del Partido Colorado, Cabildo Abierto y el Partido Independiente, propone derogar la norma, para que eso no ocurra, y transformarla en una herramienta más en la lucha contra el narcotráfico, mientras que el Frente Amplio, comandados por la izquierda radical del Partido Comunista y el MPP, se oponen a derogarla.
Sólo 4 países en el mundo tienen vigente una norma similar, y ellos son Guatemala, Mozambique, Cabo Verde y el nuestro, mientras que el resto del mundo a adecuado la normativa a los tiempos modernos.
Lo realmente alarmante, es que hay fuerzas políticas como el Frente Amplio, que se oponen a enfrentar con mejores herramientas al crimen, cuando por ejemplo, son los primeros en gritar a viva voz que el gobierno es amigo del narcotraficante uruguayo Marset, pero resulta, que cuando se proponen medidas, para mejorar las chances que la policía enfrente con herramientas modernas al delito, son los primeros que salen trancar dichas mejoras.
Parece que la palabra allanamiento, es una mala palabra para la izquierda nacional, cuando debería ser un procedimiento normal para quien camina por dentro de la ley.
Desde los partidos de la Coalición Republicana es muy claro el concepto, de que esta es una norma que no va a ser mágica, no va a traer la solución inmediata a los enormes problemas de seguridad que tenemos, pero que resulta indispensable para mejorar las condiciones de lucha contra el delito.
Ya Jorge Larrañaga había propuesto en su reforma que por muy pocos votos no salió en el año 2019, el allanamiento nocturno.
De allá a hoy, el narcotráfico ha aumentado, y hoy se lleva la vida de muchísimos orientales, en su gran mayoría, jóvenes.
Por eso, junto a las elecciones del 27 de octubre próximo, vamos a apoyar la reforma, introduciendo junto al voto, la “papeleta amarilla” de apoyo al mismo.