
El aún presidente del Instituto Nacional de Colonización (INC), Eduardo Viera, participó el pasado viernes en un encuentro realizado en el Cenur Paysandú, en el marco de su visita al departamento junto al ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Luis Alfredo Fratti, donde confirmó su decisión de dejar la presidencia del organismo. En diálogo con el periódico «El Telégrafo», Viera afirmó que «quedaron de manifiesto los intereses políticos» en el reciente debate nacional sobre el rol del INC, y aseguró que su breve gestión fue «totalmente diferente» a su experiencia previa en la actividad gremial.
La actividad, promovida por la Asociación de Funcionarios del Instituto Nacional de Colonización (Afinco) y la Sociedad Fomento de Guaviyú, se desarrolló frente a los cuestionamientos que ha enfrentado el instituto en las últimas semanas. Además de Viera, participaron el sociólogo Agustín Juncal -exfuncionario del INC y docente de la Facultad de Agronomía- mediante videoconferencia, y Karina «Chabela» Blanc, colona de la zona de ruta 26.
Viera sostuvo que la discusión reciente sobre la compra de tierras por parte del INC ha estado marcada por una fuerte politización: «Se le ha transmitido al pueblo que no sabe lo que es colonización, cosas que realmente no son así. He visto informes económicos analizados desde un punto de vista que uno se cuestiona», expresó. Si bien valoró el intercambio de ideas entre diferentes sectores políticos, remarcó que lo vivido en los últimos tiempos «es otra cosa», refiriéndose a una «lucha para que ese campo no se compre».
Respecto a su renuncia, que se formalizará con la asunción del próximo presidente -el productor lechero Alejandro Henry Rodríguez, cuya venia parlamentaria se tratará esta semana-, Viera aclaró que no está arrepentido. «Me voy convencido por todo lo que he visto y he hablado, de que quien ocupe mi lugar vendrá con el mismo objetivo, mismo programa y similar plan de gobierno», señaló. Además, recordó que el actual proyecto de compra de tierras para el instituto ya estaba previsto en el programa de gobierno, «algo que me gustó mucho que un candidato a la presidencia, como Orsi, manifestara en su momento».
Durante la jornada, el ingeniero agrónomo Jorge Azziz, responsable regional del INC en Paysandú, expresó su preocupación por el escenario actual. «Hay una movida grande y muchos intereses en torno a la tierra; sabemos que es uno de los negocios que más dinero mueve en Uruguay y nosotros somos un jugador más ahí», afirmó. Advirtió que si el instituto no se comunica activamente con la sociedad, «nos van a pasar por arriba».
Azziz también defendió el rol del INC como instrumento para democratizar el acceso a la tierra y frenar su concentración: «Vamos a mostrar con números que el instituto ha operado como un elemento que ha obstaculizado, en la medida de sus posibilidades, la concentración de la tierra», subrayó.
Por su parte, Karina Blanc señaló que el debate se ha desviado hacia temas que no hacen al fondo de la cuestión. «Genera desinformación y malos entendidos, y no permite trabajar y ver para adelante», sostuvo. En su intervención, destacó la alta demanda insatisfecha por tierras: «En Uruguay se presentan por año más de 1.000 familias para ser colonos y solamente un poco más de 100 acceden a campos de colonización. A toda esa gente que está esperando, hay que darle informaciones ciertas».