Por Carlos Silva
En los últimos años los uruguayos fuimos recuperando calidad de vida. La situación económica del país ha mejorado, con mayor estabilidad, la inflación es la más baja en años, el déficit fiscal se redujo a la mitad y se bajaron impuestos, luego de gobiernos que solo los aumentaron.
Uruguay vivió varios momentos complejos desde el año 2020 hasta ahora y los mismos no han sido excusa para gobernar bien y gobernar para la gente. La primera crisis cayó a los 13 días de asumir el gobierno, con una pandemia que rompió todos los esquemas y nos hizo replantearnos hasta el modo de vida.
Fue un momento tremendo para el mundo, sobre todo para el Uruguay, porque el gobierno del Frente Amplio que se había ido dos semanas antes, había sido advertido por las autoridades internacionales de la Salud de que una pandemia así, iba a llegar de manera inminente al país. Sin embargo, no tomaron ninguna previsión, dejando que el que viniera el 1º de marzo del 2020 a la Torre Ejecutiva, fuera el que se hiciera cargo.
Todo esto es importante recordarlo, porque nos dice mucho de cómo actuó el actual gobierno, no sólo con el problemón que se compró con la pandemia, por la cual tuvo que dejar de lado mucho de sus planes y atender lo que se venía, sino que cuidó como salíamos de esa situación, el día después y los motores de la economía no se apagaron como en otros países.
Lo hizo dejando de lado los planes de ahorro y duplicando los planes sociales para los más vulnerables, a quienes se decidió como no podía ser de otra manera, no dejarlos a pie. También se tomaron medidas flexibilizando los seguros de paro, para que todos aquellos trabajadores, cuyas empresas presentaban dificultades, no se quedaran sin un sustento.
Entonces, el gobierno mostró tener alta sensibilidad social y apostar a ayudar a reactivar el país, promoviendo la postergación de pagos de impuestos y ampliando la cobertura a quienes lo precisaban y apoyando distintas situaciones que se iban planteado por la crisis.
A nivel regional, frente al problema de la diferencia cambiaria, el gobierno ha estado presente, buscando junto a los comerciantes, empresarios y trabajadores, medidas paliativas que ayuden a mejorar la situación por la que estaban atravesando. Varias de esas medidas y con la diferencia que ya no existe, aún hoy siguen vigentes y son de gran impacto en la economía local. Todo esto nos viene ayudando a recuperar la economía de todo el litoral con este nuevo escenario político que tiene Argentina.
Con solo estos dos ejemplos, queremos mostrar que el gobierno ha estado siempre tomando medidas para buscar soluciones y principalmente, ha sido un gobierno que dio la cara. Enfrentó las críticas más duras y la oposición más acérrima, que no perdonó una pero nunca dejo de atender los verdaderos problemas de la ciudadanía.
Al final del día, la población sabe quiénes han estado trabajando para garantizarles más calidad de vida, más libertad y mejores oportunidades, y quiénes solamente, se han dedicado a poner el palo en la rueda. Por esto y mucho más, sigamos cambiando, Álvaro Delgado Presidente.
