Por Mario Sancristóbal
Cuando ya hace casi un año que se decretara el estado de Emergencia sanitaria en nuestro país , que se suponía no duraría más de seis meses y hoy ya nadie se anima a vaticinar cuando culminará , seguimos dialogando con los responsables de empresas de servicios que han sido muy perjudicadas por esta situación.
ACTIVIDAD PARALIZADA
Estuvimos charlando con Héctor Fernando Forti Sagaría, -conocido como “Toti” por muchos-, responsable de la empresa Toti Sonidos, proveedor de sonido e iluminación , para fiestas y eventos de todo tipo y le consultamos como ha sido transitar casi un año sin poder realizar la actividad en forma normal y nos dijo que “Ha sido un año extremadamente difícil, desde marzo del año pasado cuando se cortó de forma abrupta todo lo que se realizaba como actividad normal, por ejemplo proveer de sonido e iluminación a un par de boliches bailables que tenían actividad permanente , hasta no poder siquiera realizar una fiesta de cumpleaños y ni que hablar con los mega-eventos como recitales o espectáculos que ya teníamos en agenda y que se reprogramaron en primera instancia y que finalmente quedaron suspendidos en forma definitiva o a la espera de fijarlos en una fecha en la que se pueda realizar eventos”. “La actividad esta frenada, -sobre todo en lo que a fiestas se refiere-, la gente no quiere hacer ninguna fiesta aún con el nuevo protocolo, porque sin baile no quieren festejar y yo los entiendo, una fiesta sin baile es medio raro”, dijo.
IMPACTO DE LA PANDEMIA
Por otro lado Forti dijo que “Además todo lo que es actividad de escenario quedó en nada de nada y eso nos lleva a decir que la pandemia nos afectó muy fuertemente casi en 100% y hay cosas que se hacen difíciles de entender porque para abonar impuestos y tener la empresa abierta somos legales, pero si realizamos la tarea por la cual pagamos resulta que se nos toma por ilegales, es muy complicada nuestra situación, porque hay 7 personas que trabajaban en forma directa con nosotros y en forma indirecta otro tanto y quedaron sin nada”, señaló. Le consultamos hasta que punto perjudica el hecho de estar sin tareas tanto tiempo , sobre todo teniendo en cuenta que en este tipo de servicios la renovación de equipamiento es constante y nos contestó: “El hecho de estar cerrados y no poder trabajar hace que sea más cuesta arriba poder renovar equipos y material de trabajo, vamos para un año sin encontrar soluciones y entendemos que debe ser complicado pero a nosotros parece que no se nos entiende, porque lo nuestro no es un hobbie, es un emprendimiento con mucha inversión para que no se nos tenga en cuenta y nos tengan en el olvido. Como muchos colegas de todos los rubros anexos a este tipo de servicios. Obviamente no hay posibilidad de generar renovación de equipos de ninguna manera y al igual que nosotros hay otras empresas que hay invertido mucho capital y la estamos pasando muy mal en esta situación de pandemia”.
