Por Karina De Mattos.
El Departamento de Desarrollo Social de la Intendencia de Salto se reunió con el Colectivo de Ollas populares con la finalidad de organizar el trabajo conjunto y la potenciación del mismo. CAMBIO dialogó con el director de Desarrollo Social, Prof. Regino López quien expresó detalles de la labor que se realiza:
-¿Qué lineamientos se trabajan
en conjunto con la red de ollas
populares?
-Nos reunimos el pasado jueves con el colectivo de ollas populares de Salto. La idea de la reunión fue la de ir avanzando en la propuesta de borrador del convenio a firmar con la red de ollas para poder de esta forma mensualmente tener una suma de dinero que se le va a entregar a esta red de ollas en forma de alimentos. Es decir, la idea es que con ellos podamos acordar que nos digan a la Intendencia de Salto cuantos alimentos son necesarios, en que variedad y cantidad, y así de esta forma poder hacer la entrega óptima. Ellos atienden ollas populares y merenderos, por lo que el objetivo nuestro es que sean ellos los responsables de la distribución, en el sentido de cuánto va para cada lado, lo mismo que en la administración de esto.
-¿Cuál es el trabajo que se articula con la red?
-Se trata de un trabajo en conjunto, en el que Desarrollo Social aporta una funcionaria técnica, asistente social, que atiende y trabaja conjuntamente con ellos. También la idea es generar un vínculo en conjunto. Hay lugares por ejemplo en los puntos de distribución de alimentos que se realizan a través de la Intendencia de Salto, desde Desarrollo Social y el CECOED en los que la idea es trabajar coordinando con quienes realizan y organizan las ollas populares para que integren. Por ejemplo conocer los días que se entregan alimentos para equilibrar con las demás ollas y que se puedan atender todas las realidades. También se trabaja en un modelo ideal de convenio, porque la finalidad de esto es que ellos aporten en torno a la propuesta que nosotros les presentamos. Que consiste en pensar una suma mensual y ordenar con ellos la distribución. Además nos interesa conocer a la población que atienden, para plantearnos cómo trabajar el contexto de vulnerabilidad de esas personas.
-¿Cuáles son los desafíos de este trabajo?
-El tema pasa por la generación de esos espacios de coordinación donde uno tiene la situación de atención a la emergencia a través de la olla o del plato caliente para la población. Pero después esto también requiere un abordaje un poco más integral de las situaciones sociales, por eso la presencia de una técnica de referencia. El trabajo posteriormente es de todo el equipo técnico porque ella es quien trasladará a este para atender cada una de las situaciones que se vayan planteando. Porque si bien el tema es alimentación, pero también es transversal toda la situación social y la realidad que atraviesa esta población. Por eso la importancia de la mirada técnica. El trabajo con la red de ollas también nos permite generar espacios de planificación para abordar otras situaciones y propuestas, por ejemplo, culturales, deportivas, que generen mayor integración social, que también atienda la atención de esta realidad que todos conocemos, que es compleja y que además requiere una mirada integral. Por eso es que nosotros planteamos tener una coordinación continua donde se intercambie, evaluar las situaciones, saber a dónde poner más énfasis. Quiero destacar la disposición de la organización de la red de ollas para el trabajo. Ni bien los convocamos, hace un tiempo que venimos trabajando, coordinando, reuniéndonos, generando propuesta del convenio y realmente esa disposición permite que podamos avanzar.
