El Grupo de Análisis y Seguimiento del Riego y Agua en el Suelo (GRAS) del Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA) ha brindado su informe del mes de abril, con datos claves sobre el estado agroclimático del mes en Uruguay, destacando condiciones hídricas que superan los registros históricos.
Según las estimaciones del GRAS, el estado hídrico promedio de los suelos durante abril mostró niveles excepcionales, con un contenido de agua en el suelo (medido como porcentaje de agua disponible, PAD) fluctuando entre el 90% y el 100% en todo el país. Las precipitaciones acumuladas también sorprendieron, variando entre aproximadamente 150mm y 400mm a lo largo del territorio uruguayo. Estos valores fueron consistentemente superiores a los esperados para abril.
En cuanto al índice de vegetación (NDVI), los datos revelan un panorama alentador. Los valores registrados fueron iguales o superiores a los esperables para esta época del año en todo el país. El NDVI es una herramienta crucial para estimar el desarrollo de la vegetación, y su comportamiento refleja condiciones óptimas en la cobertura vegetal. El análisis del porcentaje de agua disponible en el suelo (PAD) confirma la tendencia observada en otros indicadores. Durante abril, los valores estimados de PAD estuvieron por encima de lo esperado para este mes del año en prácticamente todo el país. Este dato es fundamental para evaluar la disponibilidad de agua para los cultivos y pasturas.
El Agua no Retenida en el Suelo (ANR), que incluye el escurrimiento superficial y los excesos de agua, también fue notablemente alto durante abril, con volúmenes excedentes en todo el territorio. En cuanto al Índice de Bienestar Hídrico, se observa una situación favorable, con valores estimados entre 90% y 100%.
El Niño se desvanece
El fenómeno climático El Niño-Oscilación del Sur (ENOS) está experimentando una transición hacia condiciones neutrales, según el último informe del IRI de la Universidad de Columbia. Las anomalías de temperatura del agua del mar (TSM) en el océano Pacífico ecuatorial muestran un leve calentamiento, pero cerca de la costa sudamericana se registra un enfriamiento. Según los datos recopilados, los vientos alisios en el océano Pacífico ecuatorial han estado debilitados al este e intensificados al oeste de la línea de fecha, lo que indica un cambio en los patrones climáticos. Aunque el Índice de Oscilación del Sur se ha mantenido en valores negativos, se espera que las condiciones se estabilicen hacia la neutralidad. En cuanto a la temperatura del agua de mar, las anomalías en el océano Pacífico ecuatorial durante abril se mantuvieron por encima de los valores normales, pero con una intensidad menor en comparación con meses anteriores. Cerca de la costa sudamericana, se observaron anomalías negativas, indicando un enfriamiento en esa región. En cuanto a la evolución semanal de las anomalías de TSM por regiones, todas las regiones Niño mostraron un enfriamiento en abril de 2024, lo que ha contribuido al debilitamiento de las anomalías cálidas.
En lo que respecta a los vientos alisios, durante abril se observaron levemente debilitados al este de 160°O, mientras que se intensificaron al oeste de la línea de fecha. La actividad convectiva en el océano Pacífico ecuatorial durante marzo y abril se ha mantenido cercana a los valores normales en la mayoría de la región, indicando un cambio en el patrón típico asociado con El Niño.
El Índice de Oscilación del Sur (IOS) ha mostrado un debilitamiento desde marzo de 2024, quedando en valores negativos al final de abril. En cuanto al Índice Oceánico de El Niño, en el trimestre enero-febrero-marzo tuvo un valor cercano a un Niño moderado a fuerte. Los pronósticos computacionales para el trimestre mayo-junio-julio indican que las TSM estarán cercanas a sus valores normales, con un 72% de probabilidad de que las condiciones sean neutrales. Sin embargo, se prevé un aumento en las posibilidades de desarrollo de una fase fría a partir del invierno.
