viernes 3 de mayo, 2024
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Desde la Junta Departamental recordaron los 66 años de presencia de la Universidad de la República en Salto

Por Andrés Torterola.
El jueves 4 de mayo, la sede Salto de la Universidad de la República cumplió 66 años. Si bien los orígenes de la presencia de la UdelaR en el departamento se remontan a fines del XIX, es a partir del año 1957 en que se establece definitivamente, constituyendo un faro al norte del país, dijo en su oratoria de la Junta Departamental la edil del Frente Amplio Marcela da Col.
ESFUERZO MANCOMUNADO
Reconoció y saludó a quienes bregaron por su concreción, hoy la mantienen viva y de puertas abiertas. “No puedo dejar de mencionar la apertura en estos últimos años, en procura de consolidar más y mejor Universidad en el interior del país. Si bien la Universidad de la República es autónoma y co – gobernada, contó, durante los gobiernos progresistas, con un presupuesto – aunque nunca holgado – que le permitió crecer y acoger mayor número de estudiantes”. Por estos días, sin embargo, ha cobrado estado público que un grupo de estudiantes universitarios no habían recibido su monto de beca para la alimentación, la que se brinda a través de tarjetas de Bienestar Estudiantil. No se hicieron esperar las manifestaciones de solidaridad desde el gremio estudiantil y el sindicato de docentes, quienes actuaron prontamente encontrando respuesta en la Intendencia de Salto. La solución no admitía demoras, ya que de forma inmediata estaba afectando la salud de los estudiantes y, a largo plazo, puede constituirse en factor que impida seguir sus estudios, sobre todo tratándose de estudiantes provenientes de otros lugares. La Intendencia entrega entre 93 y 120 viandas por día en los lugares de residencia y estudio, ya sea en calle Artigas y Piedras o en la oficina de calle Uruguay, además manifiesta su intención de seguir colaborando hasta que se haya resuelto la situación definitivamente.
SIN FONDOS PARA BIENESTAR ESTUDIANTIL
Este hecho deja en evidencia tres formas en que se manifiesta la política económica llevada adelante por el gobierno. En primer lugar, el recorte presupuestal infligido a la educación en general y a la Universidad en particular; a modo de ejemplo, la rendición de cuentas de 2022 no destinó fondos que permitieran reforzar a Bienestar Estudiantil. En el pedido presupuestal para esta Rendición se volverá a solicitar. En segundo lugar, evidencia una gestión mala, incapaz de prever un gasto que ya ha sido fijado; pero sobre todo por insensible, incapaz de reconocer que los estudiantes tienen el derecho de contar con su beca ya asignada. Por último, devela una situación creciente de pérdida de empleo y de pérdida de poder adquisitivo de las y los trabajadores, puesto que las familias de estos estudiantes no están en condiciones de sostenerlos. Por todo lo expuesto, imposible no tener sentimientos encontrados; por un lado, la alegría de estos 66 años de crecimiento de la Universidad de la República en nuestro departamento y, por otro, el pesar ante decisiones que obstaculizan ese proceso.
Por eso saludamos a quienes obstinadamente dedican parte de su vida para poner la educación universitaria al alcance de todas y todos.