Por Cary de los Santos.
Saturnino Ribes al despojarse de su compañía “Mensajerías Fluviales a Vapor” y de su antiguo astillero naval en el Pueblo Nuevo, los obreros, lavanderas y comercio en general quedaron totalmente desamparados. En épocas anteriores, Ribes había conducido muy hábilmente sus compañías de navegación fluvial de transporte de pasajeros y de carga y sus astilleros, siempre estaban activos, ocupando en ellos cientos de obreros que no solo llevaban el pan a su casa, si no, que el armador francés le brindaba la posibilidad de estudiar música y de que se superaran en su profesión o carrera naval enviándolos a continuar una carrera en Escocia.
Y TODO CAMBIÓ AL ESTABLECERSE
“LA PLATENSE”.
Desde su inicio como armador naval fue tan exitosa la gestión de Saturnino Ribes, que llegó a imprimir su propio dinero (como buen bayones, que era) y este era aceptado en todas las transacciones que se realizaban en los comercios del progresista barrio “Pueblo Nuevo” y del “Ejido del Salto”. Sin embargo, todo cambió en los años 1887- 1888 cuando la compañía inglesa de navegación a vapor, denominada “La Platense Flotilla Company Limited” se hace cargo de la compañía y astilleros. Muchos obreros antiguos quedaron sin trabajo, otros más allegados y con vínculos comerciales y amistosos con Ribes, prefirieron serle fiel y no aceptaron trabajar con la compañía inglesa.
DESPIDO DE OBREROS EN LOS ASTILLEROS
Y VAPORES DE “LA PLATENSE”
La nueva sociedad inglesa tenía más preferencia por sus talleres navales de la Boca (1) en la Argentina, que los que poseía en el Pueblo Nuevo del Salto Oriental. Sin embargo, en este último, se realizaron algunas construcciones de vapores chicos, pero nunca llegó a igualar el ritmo que le había impuesto don Saturnino, y tampoco, llegó a ocupar un número tan alto de personal como en épocas anteriores. Y un diario local, expresaba lo siguiente: “… don Saturnino, quería hacer vapores, y fundó sobre la costa del río, en el extremo norte de la ciudad del Salto, el vasto astillero que existe á la fecha, si bien no con aquel aliento de vitalidad y fuerza, que don Saturnino le infundía con su poderosa actividad…”
El directorio de “La Platense” en los primeros días de noviembre de 1888 despidió a todo el personal del vapor Júpiter, porque el buque pasaría a los talleres para ser pintado. En el mes siguiente, la misma compañía desafectó de sus talleres navales a una importante cantidad de obreros que quedaron sin el sustento para su familia. Algunos diarios locales anunciaban el acontecimiento, y los vecinos del Pueblo Nuevo, estaban preocupados por la angustiosa situación reinante. En una de las columnas del diario salteño “La Prensa” de la edición del1º de diciembre de 1888, anunciaba a sus suscriptores, la siguiente noticia: “Despido del astillero de la Platense infinidad de obreros. Causa desconocida del despido por eso los obreros tienen en mente una huelga”.
SUPRESIÓN DEL SERVICIO DE SERENOS
La situación de la población del Pueblo Nuevo, era tan apremiante que varios vecinos realizaron una gestión ante la Junta Económico Administrativa del Departamento de Salto, para que se suprimiera el impuesto y servicio del “Cuerpo de Serenos”, ya que estos no brindaban ninguna utilidad al vecindario: “…Señor Presidente de la Junta E. Administrativa del Salto. Ante la S.V. los abajo firmantes vecinos del Cerro, del modo que mejor convenga decimos: En vista de la ninguna utilidad que reportan á este vecindario los serenos, y tomando en consideración señor Presidente que en el cerro no hay intereses mayores que guardan como serían almacenes, tiendas, platerías, etc. Puesto que aquí el comercio todo se reduce á unas pocas y tristes pulperías que a las ocho ó nueve de la noche ya tienen sus puertas cerradas. El vecindario pues está compuesto en su mayor parte de pobres jornaleros y peones, cuyo sueldo no pasa de catorce á diez y seis pesos mensuales, y también de lavanderas que apenas ganan para el sustento diario, cuando no pasan miserias. En virtud de estas consideraciones, y otras que omitimos por no serles gravosos, es que pedimos encarnecidamente a la S V tenga la bondad suprimir dichos serenos. Es favor que esperamos nos concederá por ser de gracia y justicia. Que Dios guarde á Ud. muchos años…”.
El servicio del “Cuerpo de Serenos”, eran los encargados de vigilar el orden en las calles de la ciudad y otros pueblos, cuidando además, las casas de los vecinos durante las altas horas de la noche, y estaban facultados para apoyar a todos los procedimientos de la Jefatura Política y de Policía del Salto. Sin embargo, para la conservación de dicho cuerpo, la J.E. A. había establecido un impuesto mensual en las proporciones siguientes:
-Pagan tres pesos, las casas de consignaciones, de negocios marítimos, y registros.
-Dos pesos, los almacenes por mayor de toda clase de negocio, los de loza, ferretería, muebles, barracas de cueros y maderas, oficinas de corredores, casas de martillo, joyerías, prensas y fábricas de coches.
-Doce reales, las velerías, fondas, cafés, boticas, peineterías, reñideros de gallos, y canchas de bolos.
-Un peso, las tiendas de géneros, de zapatos y de sombreros.
-Seis reales, las pulperías, confiterías, chocolaterías, botillerías y bodegones.
-Cuatro reales las casas zaguán á la calle, pagaderos por el ocupante cuando sea una familia, y por el propietario del edificio, cuando esté habitado por varias.
-Tres reales, las platerías, relojerías, hojalaterías, carpinterías, herrerías, talabarterías, grabadores, tintorerías, tonelerías, lomillerías, armerías, perfumerías, cordonerías, pinturerías, cigarrerías, peluquerías, bandolas, caballerizas, puestos de verdura ó fruta, y toda clase de carnicería, las casas sin zaguán, que tengan patio y dos ó más habitaciones, y todos los establecimientos que no estén comprendidos en los que quedan detallados…”
La crisis y angustiosa situación vivida en el Pueblo Nuevo, comenzaría a desaparecer a partir del año 1889, cuando Saturnino Ribes funda el taller “El Progreso”, hace construir el varadero móvil y luego establece las “Mensajerías Fluviales del Plata”.
-Remolcador «Argos» construido en el Taller El Progreso
-Saturnino Ribes.
